El Rally Dakar 2012 encarará hoy su segunda parte, una sucesión de arena y dunas que supondrá para los pilotos un desgaste mayor y un nuevo desafío de navegación y técnica, que se extenderá hasta el cierre de la prueba, previsto para el 15 de enero en Lima, Perú. Si el 1º de enero largaron desde Mar del Plata 443 pilotos con el desafío de llegar hasta la capital peruana tras desandar algo más de 8300 kilómetros, hoy quedan en carrera 339, un número nada despreciable para una primera parte que resultó complicada y que se hará peor al internarse en el desierto de Atacama.

De los 103 pilotos que dejaron la competencia, 38 son de la categoría autos, 52 de motos, 9 de cuatriciclos y dos de camiones, y de este total 18 son argentinos. Dentro de esta cifra, un piloto de motos y otro de camión fueron excluidos por conducta antideportiva. Además, en la primera etapa se produjo el lamentable fallecimiento de Jorge Martínez Boero.

Tras el día de descanso y un primer contacto con el desierto, hoy el Dakar cumplirá la octava etapa entre Copiapó y Antofagasta, en lo que será otra jornada extenuante y que tendrá una especial de 477 kilómetros, una de las más largas del Rally. El cansancio lo sentirán sobre todo los menos experimentados, que pasaron la noche perdidos en el desierto u optaron directamente por dormir allí. De hecho, 14 pilotos llegaron al campamento durante la madrugada, 24 lo hicieron a lo largo de la mañana hasta el mediodía y otros 13 no habían arribado al campamento de Copiapó cuando eran las tres de la tarde y el clima de día de descanso comenzaba a diluirse en el aire.

Entre los pilotos argentinos que llegaron durante la mañana de ayer estaban Emiliano Spataro y José Luis y Marcos Di Palma, quienes pasaron por el comedor del vivac para desayunar. La etapa de hoy, que en total tendrá un recorrido de 773 kilómetros, servirá a los pilotos para entrar en ritmo tras el descanso programado y el breve recreo que supuso la anulación de la sexta especial entre Fiambalá y Copiapó, por razones meteorológicas.

Si bien para los pilotos de punta estos recesos son necesarios, luego cuesta un poco más encontrar el ritmo de carrera. Uno de esos pilotos es el actual campeón en motos, el español Marc Coma (KTM), quien le dijo a Télam: “Es histórico y habitual que la etapa después del día descanso sea de las más duras y complicadas”. En cambio, para los mecánicos y auxiliares es un momento ideal para reacondicionar los vehículos, que a mitad del recorrido ya muestran las secuelas de la extenuante competencia. El Dakar llegó a su octava etapa con 4488 kilómetros recorridos y tiene como líderes al francés Stephane Peterhansel (MINI) en autos, al galo Cyril Despres (KTM) en motos, al argentino Alejandro Patronelli (Yamaha) en cuatriciclos y al holandés Gerard De Rooij en camiones.

En autos, el mejor argentino es Lucio Alvarez (Hilux), ubicado en el noveno lugar de la clasificación general, mientras que en motos es Javier Pizzolito (Honda), quien está 22º. En cuatriciclos, además de Alejandro Patronelli –que está a la cabeza con un tiempo a favor 58m53s–, Tomás Maffei (Yamaha), Marcos Patronelli (Yamaha) y Lucas Boneto conforman el poker de argentinos que dominan en la categoría.