Usted va comenzar su tercer mandato, ¿cómo ve esto siendo que muchas veces criticó a los dirigentes de las federaciones que se enquistaban en sus cargos?

–Creo que son cosas diferentes. Yo siento que mi función es distinta. Yo me siento dentro de un proyecto político, y me siento un trabajador más dentro del proyecto. Fui convocado para la Secretaría de Deportes, pero siempre tengo a disposición mi renuncia para cuando la ministra Kirchner o la presidenta Cristina Fernández de Kirchner lo dispongan. Yo me siento orgulloso de formar parte de todo este proyecto, pero también sé que si me tuviera que ir, podría volver a la calle para acompañar las banderas que siempre he abrazado. Ahora, a mí me parece que no es lo mismo ser un funcionario, llamémoslo medio, que un dirigente que tiene la presidencia de una organización.

–Hubo federaciones que han avanzado, que se han modernizado y que tienen dirigentes que ante esta nueva aparición del Enard se han aggiornado para poder llevar adelante programas. En la dirigencia del deporte pasa lo mismo que pasa en el país. Hay dirigentes proactivos, lúcidos y hay dirigentes conservadores.