El llanto de hace ocho meses se transformó ayer en un gesto de desahogo y euforia. El éxtasis se instaló en el barrio de La Paternal para que la próxima Navidad tenga motivos reales en el momento de la celebración, ya que Argentinos regresó a la máxima categoría del fútbol argentino. Cuando parecía que el desencanto dominaba la escena unos pocos partidos atrás, y que le terminaron costando el puesto a un hijo pródigo de la casa como Claudio Borghi, el temple de sus hombres más experimentados sirvió para conducir al resto al objetivo deseado. Si bien el festejo fue medido por los alrededores del estadio Diego Maradona, su gente respiró aliviada por volver a sentirse parte de la elite.

La fábrica inagotable de talentos accedió a uno de los cinco lugares que otorgó su zona en esta nueva versión del Nacional B, después de igualar ante Douglas Haig, y espera con más optimismo el 2015, donde formará parte de un inédito campeonato de 30 equipos.

La decisión de muchos jugadores surgidos de la institución, quienes entendieron que Argentinos los necesitaba para cumplir el retorno, fue determinante para alcanzarlo. Nombres como Matías Caruzzo, Juan Román Riquelme y Cristian Ledesma, nacidos en las entrañas del club, no dudaron cuando su lugar de pertenencia los requería en una situación extrema. Y ahora ellos tres también se ubicaron en el podio con el resto de las glorias.

El día era especial y muchos querían estar presentes. Sergio Batista cerraba el puño cuando el árbitro marcó el final. El campeón del mundo en México ’86 comparte la alegría con su hijo Nicolás, integrante del actual plantel, de la misma manera que lo hace Sergio, otro de la dinastía Batista que siempre se hace tiempo para ver a su querido club.

La lista de apellidos es interminable y, desperdigados por distintos lugares del mundo, ellos también acompañan en este momento de encanto.

Como ocurrió a lo largo del torneo, el equipo no brindó un juego convincente y le costó mucho prevalecer ante Douglas Haig, que ya no tenía posibilidades de ascenso. De todas maneras, a su público no le importaron las carencias del plantel: lo único que interesaba era despedirse cuanto antes de la segunda categoría.

La reestructuración para lo que viene ya está en marcha, y se mencionan futbolistas que podrían sumarse para defender el lugar en Primera. Pablo Ledesma –el ex Boca que curiosamente estuvo ayer en el estadio– y Clemente Rodríguez son dos de los apuntados. Pero todo eso se evaluará en los próximos días.

El momento de disfrutar es ahora. Por el resurgimiento, por su historia y por el sostenimiento de una manera de vivir el fútbol, Argentinos es nuevamente de Primera. Y pretende que su estadía en lo más alto no sea pasajera, si no interminable.

Estadio: Argentinos.

Arbitro: Darío Herrera.

Goles: 5m Alvarez (A); 33m Cavalluci (DH).

Cambios: 64m Orué por V. Gómez (DH), 70m Castillejos por Rinaldi (A) y Martino por Carrera (DH), 71m Cano por Lenis (A), 81m Levato por Moreno (DH), 90m Nagüel por Riquelme (A).