Ya está en imprenta la continuación del masivo –realmente masivo– catálogo del patrimonio edificado nacional en el que estuvo trabajando por años el Ministerio de Cultura. Las imágenes dan una idea de lo que va a ser el segundo tomo de la obra, que llega a las 750 páginas, prácticamente el doble del ya impresionante primer tomo. El trabajo de investigación fue tan masivo que hubo que dividir la segunda sección, que toma edificios de entre 1880 y 1920, en dos grandes volúmenes. Patrimonio Arquitectónico Argentino 1880-1920 tiene cuatro secciones, dedicadas a gobierno y urbanismo, educación y salud, culto e infraestructura e industria y servicios, una organización que refleja que estos cuarenta años fueron de construcción física del país. El trabajo fue llevado adelante por el entonces director de Patrimonio y Museos, Alberto Petrina, que acaba de pasar a ser fundador y encargado, después de cinco años, del flamante Centro de Estudios del Patrimonio Arquitectónico Nacional. En este Centro también tiene un rol relevante el arquitecto Sergio López Martínez, que tuvo la dirección académica de este superlibro. Esto significó catalogar 4500 edificios y organizar y editar un banco de cuarenta mil fotos, dibujos y documentos gráficos. López Martínez es profesor asociado de Arquitectura Argentina y profesor adjunto de Historia de la Arquitectura III de la UBA, en las cátedras que dirige Petrina.

Mientras se termina el tercer tomo, que promete ser tan abarcador como este segundo, se trabaja desde el ministerio para digitalizar toda la información. Esto va a permitir por primera vez tener un banco de datos de patrimonio a nivel país, un verdadero logro y una herramienta.