La Cooperativa de Provisión de Obras y Servicios Públicos de Brandsen, 40 kilómetros al sur de La Plata, compró en el 2001 la vieja usina de leche del pueblo (foto). En estado de abandono luego de más de diez años de cierre de la empresa, la cooperativa se dispone a hacer uso de sus nueve hectáreas de campo y a adaptar a una nueva función la vieja estructura fabril. Lo interesante de este gran predio es que está inserto en los límites urbanos del partido, linda con el campo abierto y cuenta con una laguna artificial, que en la época de la usina de leche era utilizado como decantador del suero derivado de la producción procesada en la fábrica.
La idea fue tomando forma y, con la organización del Distrito 1 del Colegio de Arquitectos de la Provincia de Buenos Aires y el auspicio de la Federación Argentina de Entidades de Arquitectos, se lanzó un concurso de ideas y croquis preliminares para la creación de un Parque Urbano para esta localidad del suroeste bonaerense.
Los arquitectos del Distrito 1 nombraron como asesor a Rodolfo Morzilli, quien redactó las bases. La municipalidad fue representada por Carlos Mendizabal, secretario de Obras y Servicios Públicos, y Pablo Garófoli, director de Planeamiento.
El concurso llama a integrar el paisaje de campo bonaerense con actividades culturales, recreativas, deportivas y de viviendas. El proyecto es ambicioso: se incluye una sala de espectáculos preparada para ópera, ballet, teatro y conferencias para 600 personas; un microcine acondicionado para orquesta de cámara para 150 personas; un salón de exposiciones como galería de arte, con adecuación de uso de fiestas y recepciones para 200 personas.
La idea es acceder a convenios con el Instituto Cultural Bonaerense y contar con los elencos estables de la provincia. También acceder a exposiciones de arte de las colecciones de los museos provinciales.
El programa se complementa con una escuela de artes y oficios, un mercado de productos regionales, oficinas públicas, un polideportivo municipal, equipamiento gastronómico comercial, una plaza cívica, 50 lotes con viviendas individuales y un espacio verde público.
El proyecto tiene una superficie total de 10.000 metros cuadrados cubiertos, lo que representa un 50 por ciento de viviendas y otro 50 de equipamiento urbano. Esto implica ocupar sólo el 10 por ciento de las nueve hectáreas disponibles.
El concurso, que empezó en diciembre, ya está en la recta final –dentro de una semana será la entrega– y el próximo 6 de abril se sabrá el resultado. El llamado tiene como principal motivación brindar un atractivo a esta región de la provincia y lograr una reactivación que amplíe el miniturismo y ayude a generar nuevos puestos de trabajo. Para finalizar, las bases convocan a los arquitectos a proponer “ideas brillantes pero también realistas, que hagan posible que el sueño de hoy sea mañana una realidad”.