Los aniversarios suelen servir de excusa y los quince años de la muerte de Serge Gainsbourg no son la excepción: ¡marche urgente un disco tributo! Sin embargo, pese a los reparos que puedan tenerse (en especial cuando el artista en cuestión ya ha sido revisitado varias veces), este disco garpa no sólo por su reparto estelar, a menudo en dúos o tríos, sino también por las reinterpretaciones del más célebre fumador de Gitanes. Los Franz Ferdinand arrancan a toda máquina con Sorry Angel, y se aseguran la ayuda de Jane Birkin, musa y esposa del mismísimo Gainsbourg, y también entregan buenas versiones Michael Stipe (R.E.M.), Placebo, Tricky, el ex Pulp Jarvis Cocker junto a Kid Loco, y Marianne Faithfull con Sly & Robbie. Las dos sorpresas del disco son la reaparición de Portishead, bastante lejos de los lamentos trip hop que degustamos en los ‘90, y la interesante reinterpretación de Je t’aime mon non plus, el himno erótico por excelencia del mujeriego serial francés. Allí, los gemidos de Karen Ellson, la esposa de Jack White, no tienen como destinatario a un caballero sino a la reina indie Cat Power. Sólo faltó que alguien se dignara a invitar a Mick Harvey, corazón de los Bad Seeds de Nick Cave, quien primereó hace rato con dos discos de homenaje a Monsieur Gainsbourg.