Si en los ‘90 Los Brujos cantaban: “Señor diablo, los cronopios no somos malos”, en el presente una banda venezolana tomó a otras criaturas surgidas de la mente de Julio Cortázar para bautizarse. Famasloop, un trío que conjuga la electrónica con la canción pop, habla de la admiración por el escritor argentino: “En Rayuela, él te deja que decidas qué camino tomar como lector. Y nuestro proyecto no es solamente música, siempre fue interactivo y multimedia. Si pones nuestro disco en una computadora o si entras a nuestra página web, cada cosa que tocas genera un sonido y puedes armar tu propia canción. Eso se parece al mundo real: Youtube, Myspace... ¿Por qué la música tiene que quedarse atrás?”, plantea el cantante, Alain Gómez. Y enseguida remata, jocoso: “Aparte, si tienes fotografía, diseño, artes visuales y música, se amplía el rango de chicas que pueden estar interesadas”.

Cecilia Salas

El primer disco de Famasloop se llama Tres casas, fue producido por Tweety González, y está dividido en igual número de partes, a las que se accede por una “puerta” instrumental de medio minuto. En cada “casa” habitan tres canciones. “Nos dimos cuenta de que había muchas vertientes dentro del disco y decidimos hacer un proyecto conceptual”, explica Rafael Urbina. “En la casa 1 están las canciones más comerciales, en la 2 las más experimentales y en la 3 las más espirituales o sentimentales.” Gómez toma la posta: “Teníamos un rollo inmenso y no sabíamos cómo ordenarlo. La idea de las tres casas nació de una foto que tomó un ex integrante de la banda. Y como era nuestro primer disco, quería que se pareciera a la forma de conocer a una persona. La casa 1 es como la tarjeta de presentación; la 2, si se da la conversación, entonces podemos hablar sobre nuestras ideas políticas y sociales; y la 3, si es con una chica, un besito o algo más. Pero no todo el mundo llega a la casa 3, tanto en la vida como con el disco”.

Tiene razón el tercer integrante de Famasloop, Gabriel Millán, cuando dice que la “casa 1 es la más fácil de escuchar”: allí está Mundo, una canción de contrastes que arranca diciendo que “los militares usan botas, las putas también”; y que más adelante asegura: “Simón Bolívar era un hombre, Michael Jackson también”. “Hemos tenido problemas por la canción: no la pasan en la radio, ni el video por televisión, porque los medios se autocensuran por miedo al gobierno”, afirma Gómez. “Hay veces en que uno busca la canción y otras, como en este caso, en las que sucede al revés: la letra era lo que surgía en el momento en un ensayo. Obviamente que hay un subconsciente trabajando, porque no es casualidad que hayamos hablado de militares y putas, porque los militares están todos comprados y estamos hartos de que todo se resuelva con dinero o con pistolas.”

* Famasloop toca mañana en La Cigale, 25 de Mayo 722. A las 22.