Silicon Fly nació en la otra orilla rioplatense producto del hambre de su líder y compositor, Guillermo Savoi, por expandir su música en el universo. Al escuchar su último trabajo, Find a Way - Simple Version, se puede descifrar que Savoi viene y va hacia un mundo globalizado y de redes, y que no se queda quieto en su Uruguay natal esperando que alguien lo llame para tocar. Todos los temas son cantados en inglés con un dejo de Foo Fighters (aunque para teens), en el sonido y la potencia del vivo. Con residencia en Buenos Aires hace unos ocho meses, y sorprendido por el frío porteño, Savoi está armando su itinerario de fechas y enredándose con el paisaje, porque no sólo vino a Buenos Aires a tocar sino que también se asentó aquí para vivir. La historia de la banda desde sus comienzos, que datan de 2001, es rara y de suerte. Historia rara porque no tuvo siempre los mismos integrantes, tampoco los músicos que grabaron los discos son los que tocan en vivo. “El proyecto empezó por mi cabecita –cuenta Savoi–- un día que quería hacer algo diferente, aunque no sé si tan diferente. Después tuve la suerte de que amigos se hayan colgado del proyecto. Al principio estás medio solo, pero tenés que creer en tus ideas y seguir para adelante. Yo creo que las cosas que se fueron dando no son en vano.”

Y la parte de la suerte entra en esta historia cuando Silicon Fly grabó Find a Way - Simple Version en Los Angeles, en el estudio Ocean Way, producido por Warren Riker, que ya había trabajado con Santana y The Fugees, entre otros. Cuenta Savoi que un día grabó unos demos “re truchos y que sonaban horribles”, pero que el objetivo era dejarlos registrados, y se los envió a productores, asistentes de productores e ingenieros, más que nada pescando para ver si alguno picaba. “Uno de los que respondió fue Warren, que se había colgado, no sé qué vio en los demos que le mandé, pero empezamos a escribirnos mails, y me dijo que estaba en Los Angeles y que la posta sería grabar el disco en este estudio”, cuenta Savoi. Y dice que cuando vio la página del estudio no lo podía creer, era como pelotear en un potrero e irse sin escalas al Monumental. Algo de esa suerte también tuvieron cuando fueron teloneros de Evanescens en Brasil. “Había gente de la industria que vio cierto potencial e hizo movimientos estratégicos como para hacernos tocar en lugares más grandes de los que veníamos tocando”, amplía Savoi. Hasta que su estrella de la buenaventura se trasladó a Buenos Aires, donde ya estuvieron tocando con Cabezones, Smitten y para este fin de semana salió rifado Carajo.

* Silicon Fly toca este sábado en el Estadio Obras como invitados especiales de Carajo.