En México está ocurriendo que un grupo de bandas under que construyeron su carrera desde las redes sociales está haciendo el crossover hacia una masividad incipiente. En el caso del pop, Zoé está haciendo un movimiento ejemplar. Pero, de un modo más atrevido en lo musical, sigue creciendo Hello Seahorse!, un combinado de jóvenes que está resignificando la música alternativa de ese país con una articulación casi imperceptible entre su música popular y un rock deforme, sin guitarras viriles.

Lo curioso de este grupo, que viene de ganar nominaciones y premios en cuanta distinción a la música exista en México, es que sus fundadores se conocieron en MySpace, aquella red social que hace unos años prometía ser un Olimpo para la colaboración de músicos independientes, hoy caída en la desgracia del olvido. “Con Oro De Neta (el bajista Fernando Burgos) nos conocimos de casualidad. Empezamos haciéndonos comentarios en MySpace y nos juntamos a hacer música, casi sin experiencias. Así tomó forma Hello Seahorse!, así que podemos decir que el grupo tuvo una concepción rara. Pero si se arman tantas parejas en la red, ¿por qué no?”, cuenta y se pregunta Denise Gutiérrez, la vocalista también conocida como Lo Blondo.

Invitaciones a los festivales MX Beat, Vive Latino, Rock al Parque y South By SouthWest; nominaciones y premios a mejor canción y álbum en los premios Indie-O, MTV y Grammy Latino, y un lugar de preferencia en las radios indies locales, marcan la distancia entre esas primeras reuniones en 2005 entre Lo Blondo y Oro De Neta, y su momento actual, en el que, entre otros logros, se acaba de publicar en la Argentina su cuarto disco, Lejos. No Tan Lejos. “Estoy de acuerdo en que es un álbum más oscuro que Bestia (el anterior y su mayor éxito), que sonaba pop. Con ese disco quisimos lograr unas canciones que fueran fáciles de escuchar, pero en Lejos. No Tan Lejos decidimos no ceder nada. Veníamos de épocas difíciles en nuestras vidas personales y eso se reflejó en las canciones”, diferencia Denise.

La cantante tenía 17 años cuando conoció al bajista mediante la red, y aún está lejos de cumplir su primer cuarto de siglo de vida: “Mi escuela fue la vida, para la música y para todo. Aprendo haciendo”, se define; y para definir mejor su música habría que atender a eso, a su pasado como parte de un coro (su única experiencia musical anterior) de música popular mexicana y su instinto juvenil, salado en Internet con una buena dosis de músicas sin géneros y sin épocas. Lo de Hello Seahorse! en 2011, viniendo de un pasado electropop, viene a ser como lo de un Bat For Lashes latino.

Un ambiente austero y algo oscuro envuelve sus canciones, matizado con igual cantidad de máquinas que de instrumentos, y una voz bien al frente que no puede esconder su formación operística y coral. “Con Joe (el guitarrista José Borunda) tenemos mucha música mexicana encima y es natural que se filtre, pero la verdad es que es desconocido para mí cómo es que surgen nuestras ideas, técnicas y sonidos para Hello Seahorse!”

Temáticamente, su geografía también se impone en canciones como Ginebra dulce y Oro y plata, que en su rústica sonoridad entran un poco en crisis con Bestia y Criminal, sus hitos de discos anteriores agregados como bonus tracks en la edición internacional de Lejos. No Tan Lejos, un par de canciones que demuestran su gusto por el electropop, algo que también hacen realmente bien y con un aromita lo-fi encantador. En ese contexto de amplitud y riqueza en la formación musical de Denise aparece como rareza el tatuaje en su brazo: “Silencio”. Ella le dice al NO, casi al pasar: “El silencio es parte de la música. El silencio es fundamental”.