Situación: Confitería del Bauen. Sesión de fotos para el NO. Textual: “¿Por qué el heavy metal tiene que posar con cara de malo? ¿Qué pasa, nadie se garcha una mina?” (Gustavo Rowek). La frase apunta al contraste y es elocuente de un estado de situación: muchos de los referentes del heavy metal argentino están convencidos de que es el momento de abrir el género hacia cualquiera que quiera escuchar. “El primero que tiene que perder el miedo es el músico –plantea el baterista–. Durante años el heavy argentino tuvo una data de mierda, hubo errores garrafales por parte de algunos músicos que tiraron una data muy resentosa, hubo peleas estúpidas, entonces surgió un sector muy talibán que hace que cuando el movimiento comienza a expandirse, a ocupar lugares importantes, se venden más discos, la maquinaria funciona, empiezan con el “Se vendieron, son caretas” y lo achican, hasta la próxima banda que venga con la cabeza de hacer grandes las cosas. Los músicos somos en parte responsables de borrar esa data y mostrar que tocamos para todo el mundo. ¿Quién iba a pensar hace unos años que el Tano de Hermética y Rowek de V8 y Rata blanca iban a estar tocando juntos en un tributo a V8? Que Ricardo (Iorio) esté cerrando también es un muy buen síntoma para el movimiento”.

Con sólo agregar el nombre del Tano Romano al de Rowek, se puede contar un buen pedazo de la historia grande del metal local. Pero también hay otros referentes: Tito García y Eddie Walker, de Lethal, Sebastián Coria y Lucas Simcic, de Horcas, Sergio Berdichevsky, de Rowek, y Roberto Cosseddu, de Kamikaze. El NO pudo reunir a estas personalidades del heavy argentino en vísperas de la quinta edición del festival Metal Para Todos, el evento que se transformó en clásico y que este año aspira a superar, en producción como en convocatoria, a los anteriores. No van a ser dos sino tres los escenarios que reciban a cincuenta bandas desde las doce del mediodía, y cuyo cierre va a estar una vez más a cargo de Almafuerte. “Los tres están equipados hasta los dientes en sonido, backline, luces. Es como un lugar de reunión donde además de músicos y tribus hay fabricantes argentinos, una industria nacional que se hace competitiva en equipamiento y que apuesta por este evento”, se entusiasma Berdichevsky. “Es la confirmación de un movimiento que se consolida y de que hay empresarios que siguen apostando por esto. Falta que se siga sumando público para que el panorama sea ideal”, define Rowek.

–Después de cuatro ediciones, ¿qué significa este momento para el heavy argentino?

Romano: –Hay muchas bandas nuevas que tal vez no tenían un lugar así para tocar, y cuando nosotros empezamos a hacer heavy metal no existían estos eventos. Nos entusiasma por los que la seguimos remando, por las bandas nuevas y por la gente, que en un mismo día puede disfrutar de tantos grupos y quizá llevarse una sorpresa con alguno.

Cosseddu: –En los comienzos había muy poco, todo era muy primitivo. Es un orgullo ver el nivel de profesionalismo que se alcanzó no sólo en la música sino también en la producción. Se van a poder ver grandes bandas, conocidas y no tan conocidas, que suenan porque están entendiendo que el único modo de trascender con el arte es poner la verdad de tu corazón. Está bueno que vengan bandas de afuera, pero también hay que darle bola al heavy nacional, que es una expresión cultural del joven argentino de hoy y tiene un gran acervo popular por sus letras.

–¿Ahí radica la diferencia con el heavy de afuera?

Rowek: –Es una expresión que viene de afuera pero ya tiene identidad propia, no tanto en la música sino principalmente en las letras. El sello del heavy argentino es la poesía con bajada de línea.

Coria: –Con Horcas giramos por toda Latinoamérica, y el referente del heavy metal es el argentino.

–¿Qué hay para decir de la nueva escena?

Simcic: –Está bueno que haya crecido en variedad y que hayan empezado a ocuparse de hacer todo más profesional.

Romano: –Todos los que estamos acá tenemos mucha actividad y estamos grandes, entonces cuando no tocamos aprovechamos para hacer otras cosas que no son salir a un show. A veces te falta eso, las bandas nuevas que podemos ver son las que tocan con nosotros, y ahí uno descubre que hay buenas propuestas. Lo que pasa es que son tantas que se te mezclan los nombres.

Cosseddu: –Hay algunas que, aunque no son tan nuevas, recién están arrimando la jugada, como Mastifal, Serpentor, Plan 4, Granada. Es trabajo del artista hacer lo que hicimos todos nosotros: remarla, hasta cuando el remo se te transforma en un palo de escoba, o en un ancla.

* Este sábado desde las 12 del mediodía se prevé una lluvia de tachas con el festival Metal Para Todos en el Estadio Malvinas Argentinas, Gutenberg 350.