La ampliación estilística, la expansión artística y la proliferación de sellos y productoras dedicados a la música emergente ocurridos en la Argentina en estos años, que generaron un momento por demás interesante en cuanto a la música underground, ocurren asimismo en otros países de la región. Con su entretejido mestizo de culturas y políticas de Estado que apoyan las artes y culturas, Brasil tiene un notable movimiento en el que conviven el pop delicioso de Karina Buhr, la sutileza de Tulipa, la guitarra experimental de Lucas Santtana, el lime de Macaco Bong, el indie micropsicodélico de Do Amor y el crossover FM del Móveis Coloniais de Acaju. Testigos, partícipes y cabecillas rockeros de esto son los Autoramas, compost de power pop, new wave, rockabilly, garage y surf que luego de actuar en Ciudad Emergente vuelve a la Argentina para presentar su quinto disco, Música crocante.

El cantante y guitarrista Gabriel Thomaz (ao Elvis brasileiro, le gritaron en un boliche de Belo Horizonte, con el NO como testigo), que colaboró en varios hits de Raimundos y tuvo su historia en el under de los ‘90 con Little Quail and The Mad Birds, encabeza el trío y asegura: “Vivimos la edad de la música independiente. Hay muchos festivales y muchas bandas de gira por todo el país; y las producciones son cada vez mejores. Antes, una banda independiente sólo tocaba en su ciudad y en San Pablo para pocas personas, pero Autoramas ya tocó en los 27 estados brasileños. Hay mucha libertad creativa porque hay público y espacio para todos: ¡se puede hacer la música que quieras!”.

En 2013, Autoramas cumplirá 15 años de participación permanente en el nuevo rock & pop de Brasil. En ese tiempo, además de actuar a lo largo y ancho del país de Neymar y Xuxa, hicieron carrera con discos notables (Stress, Depressäo & Síndrome do Pânico o Teletransporte, editado aquí), un acústico para la MTV (Autoramas Desplugado) y giras regionales e internacionales. “Lo que no hicimos fue tocar en la radio. En Brasil, todas las estaciones son iguales y pasan los mismos veinte temas. Hace diez años que no escucho radio, tampoco las personas que conozco. Es mucho mejor tener un reproductor de MP3”, asevera Gabriel, quien además considera que nunca antes se había escuchado tanta música y de tantas partes del mundo. “Cada cultura incluye su acento al rock, pero las más interesantes con las que tocamos son sudamericanas, turcas o japonesas. En Europa, la crítica se sorprende porque dice que hacemos música original con sonidos raros”, cuenta; y con eso asiente una idea en expansión: que la periferia aporta ahora mejores discos que el eje angloparlante.

Música crocante es un caso ejemplificador: un disco de una gran calidad técnica, pero destacado por el enjambre de sonidos, múltiples puntos de fuga hacia otras épocas del rock que, de todas maneras, mantiene modernidad en su crossover melódico con el pop y en la incorporación de teclas agresivas e inmersivas y relatos con el foco puesto en la actualidad, el fin de la juventud y la vida eterna del espíritu rock. Además, el disco incluye un debut en castellano: Verdugo. La letra fue aportada por Maxi Martina (Error Positivo, Acústicos de Vinilo, Rock & Pop), a quien le pidieron colaboración luego de que el argentino los entrevistó en la radio. La línea musical de Thomaz sigue el camino de guitarras sintetizadas, un beat bailable y bajos presentes y sucios. “Ahora estamos trabajando en nuestro segundo DVD un proyecto para mostrar nuestros viajes internacionales: muchas aventuras y cosas graciosas o interesantes. Saldrá en 2013, año de conmemoraciones por nuestros 15 años”.

“No elegimos hacer rock... el rock nos eligió”, interpreta Thomaz, en referencia a sus compañeros Flavia Couri y Bacalhau (DeFalla, Herbert Vianna, Little Quail and The Mad Birds, Ultraje a Rigor). “Vivimos en una gran ciudad y nuestra cultura es cien por ciento urbana y cosmopolita. Estamos simplemente diciendo nuestra verdad”, cierra. Una verdad hablada en la lengua universal del rock.

* Autoramas toca el sábado 17 de noviembre en la Jäger Rock Nights IV, en la Ciudad Cultural Konex (Sarmiento 3131). A la medianoche.