Jueves, 21 de mayo de 2015 | Hoy
PRESENTES, LA FICCIóN JUVENIL DE ENCUENTRO
Reconocidos músicos y actores encarnan a pibes a punto de egresar.
Por José Totah
Tan cruel y tentador puede ser el bullying entre los pibes que, en algunos colegios porteños, se prohibieron los apodos alusivos a características físicas, del estilo Gordo, Narigón, Petiso y un largo listado de etiquetas. El bullying, la deserción escolar, el uso de drogas, la educación sexual, el embarazo y la “idea de futuro”, entre otros, son temas para Presentes, la ficción que produce y emite Canal Encuentro, realizada por Mulata Films y coproducida por el Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios, que el 5/6 arrancará su segunda temporada, a las 20.
El NO pasó por el primer día de rodaje y conversó con actores y músicos que tienen papeles en la tira: Emanero, Dalma Maradona, Martina Juncadella, Vera Spinetta, Nicolás Condito, Leonel Arancibia y Rocío Quiroz (también participan Julián Serrano y el actor y youtuber Lucas Castel). En muchos casos, a ellos les pasaron casi las mismas cosas que en la serie.
El set, instalado en una escuela de Parque Chas, muestra una imagen que angustia, quizá por las reminiscencias de esos años: el clásico micro del viaje de egresados, repleto de pibes con sus banderas a marcador, esperando para salir a Bariloche. Un ecosistema encriptado, con códigos propios, listo para desplazarse mil y pico de kilómetros. Los padres abajo, tratando de entender. El bautismo final o el comienzo de casi todo.
Caso 1: Noemí (la actriz Mónica Lairana) es la mamá de Mariana (Ailín Salas), que queda embarazada en 5º año y, con su novio, deciden tener el bebé. La noticia no es vivida como un pifie irremediable: se hacen felizmente cargo del niño. Inclusive, se van de viaje de egresados y Mariana deja al recién nacido a cuidado de su padre, que se pide licencia en el trabajo.
Caso 2: Emilia (la cantante de cumbia Rocío Quiroz, una de las nuevas estrellas tropicales) es discriminada porque vive en una villa y su mamá es paraguaya. Decide dejar las clases, pero finalmente vuelve porque no quiere que su hermanito pase por lo mismo. “No quiero que lo buleen a él también”, dice. Quiroz cuenta que el tema no es nuevo para ella: “Tengo amigas que son discriminadas por vivir en la villa y los demás piensan que son unas negras. Yo les digo que no escuchen lo que dicen, que sean la clase de persona que son, que no cambien”.
Caso 3: Vera Spinetta también las pasó negras. “A mí me bulearon cuando era chica porque iba a un colegio privado y, cuando me cambié a uno público, me miraban como bicho raro y me hostigaban por ser hija de un famoso. Me agarraban en el baño. Yo tendría 11 años”, recuerda la hija de Luis Alberto.
Caso 4: Arancibia explica que su personaje (al que acusan de ladrón) habla mucho de lo difícil que él mismo la pasó en 5º. “Me agarraba a piñas todo el tiempo. En mi colegio era igual: estaban el bueno y el maldito. Siempre el mismo tema de los roles y del miedo que tenemos de romper con ese lugar en el que nos pusieron”, reflexiona.
Caso 5: “De chica me crié con la info que tiraba Cris Morena: la buena, la mala, la rubia, la flaquita...”, acota Juncadella.
Caso 6: Emanero, el cantante de rap, cree interesante pensar Presentes como un conjunto, no sólo como un unitario. “Se atacan temas muy puntuales, pero están todos interconectados”, explica. La serie no apunta únicamente a la franja de 4º y 5º años, sino que la idea es que los padres también saquen algo en limpio. “Los adultos pueden entender cosas del pasado o incluso del presente a través de sus hijos. Se busca generar una identificación que ayude a decodificar cosas que los padres tal vez no llegan a entender.”
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