Jueves, 13 de agosto de 2015 | Hoy
ASES FALSOS LA MANTIENE REAL
Su plan (canción de raíz + balada pop iberoamericana) suma votos de a uno.
Por Yumber Vera Rojas
Cuando Ases Falsos cruzó la cordillera hacia Buenos Aires, lo hizo con la credencial de artista sensación de la actual escena musical chilena. Pero su vocalista y guitarrista, Cristóbal Briceño, advierte: “Somos escépticos. Llevamos varios años en esto y tratamos de no entrar en espejismos ajenos”. Lo irrefutable son los dos rasgos que distinguen a la banda santiaguina por sobre el resto de los exponentes de su progenie. El primero es su propuesta, que combina la canción de raíz con la tradición de la balada pop iberoamericana. “Lo llevamos en la sangre”, confirma el frontman. “Si bien entendí que mi forma de cantar se le hace muy extraña a mi generación, es el estilo de mis referentes: Germaín de la Fuente, Juan Gabriel, Pablo Abraira, Al Green, Roy Orbison y David Bowie”. Y su otra característica es que sus canciones impactaron en todos los estratos sociales de su país. “No pienses que no tenemos filtros. Somos bastante elitistas en la formación de nuestro público. Aunque no se trata de una elite económica, sino de capacidad crítica.”
Luego de conquistar Chile y, más recientemente, México, la agrupación de pop proletario desembarcó en la capital argentina de la mano de sus dos discos: Juventud americana (2012) y Conducción (2014), que tras su incursión en el ciclo Martes Indiegentes, en Niceto Club, seguirá presentando esta semana en la Argentina. “Conducción es difícil de conceptualizar –dice Briceño–. Pero tratamos de que fuera lo contrario a Juventud americana, que era muy extrovertido y panorámico.”
No obstante, a pesar del impacto generacional que provocó su repertorio, Ases Falsos se siente ajeno a cualquier avanzada. “No creo que por el hecho arbitrario de compartir nacionalidad coincidamos en visiones estéticas o morales con la escena”, expedita el líder del grupo anteriormente llamado Fother Muckers. “Las cosas que representan a mi generación son en su mayoría repugnantes. Tampoco les cantamos a las masas, vamos uno por uno o ése es nuestro deseo. Ojalá que nuestras canciones ayuden a descorrer algún velo. Pero si no sucede, no es el fin del mundo.”
Pese a las diferencias del quinteto con la actual escena de su país, una circunstancia que atraviesa a todo el pop independiente chileno es el estándar de calidad y de originalidad de sus propuestas, al punto de que es considerado el más alto de Sudamérica. “Motivados por la competencia, hoy hay muchos músicos chilenos que suenan, graban y tocan muy bien”, reflexiona el líder de Ases Falsos. “Es como nuestra era industrial de la canción popular.”
Pero el mayor acierto de esta movida fue que insertó la cultura popular en un contexto moderno. “Pero no te creas que somos tan tolerantes y abiertos”, objeta Briceño. “Nunca tuvimos problemas en integrar el pop a nuestra cultura autóctona porque despreciamos a esta última. Muchos le echan la culpa a la dictadura. Yo no estoy tan seguro. También podría pensar que los que ocuparon este territorio carecían de ambición por trascender. Así que no me cuesta imaginar que el desapego cultural de Chile tiene larga data. Si así fuera, me sentiría orgulloso de formar parte de un linaje sin memoria, desapegado, y huraño.”
* Jueves 13 en Casa Pulsar (calle 58 512, La Plata, a las 21) y viernes 14 en Ultra (San Martín 678, a las 23).
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.