EL DICHO
“Ultimamente no hago sino escribir sobre nuestra situación bajo una perspectiva política y militar. Somos empujados hacia un rincón y la razón por la que hablo en primera persona es porque hay mucha gente que quiere protestar contra la guerra y esto y aquello... Miren, el Oriente Medio ha sido una pila de mierda durante más de... ¿siete décadas? No sé, quizá sea más tiempo que eso. Supongo que lo que tratamos de hacer es mostrarles, en primer lugar, que hay un camino, que hay un modo de hacer que su país funcione. Segundo, que si no la entienden, vamos a patearles más el culo. Si es que siguen con lo de los terroristas y todo eso (...) Si estás con Al Qaida, sos mi enemigo y te reto a encontrarnos uno contra uno. ¡Cuando quieras! Porque te voy a fuckin’ destruir. Gracias.” Parte del esperanzador y tolerante mensaje que Phil Anselmo, ex Pantera y actual Superjoint Ritual, grabó para las tropas estadounidenses a pedido de una radio metalera.

EL HECHO
RZA, el más ilustre miembro del colectivo Wu Tang Clan, no vendrá a Buenos Aires para presentarse el próximo 23 de octubre, tal como se había anunciado. Lo más interesante es que él mismo, ante la imposibilidad de bajar a Sudamérica ese día, prometió un “les mando al Clan” y pospuso su llegada para diciembre. Entonces, cambio de planes: RZA no, pero parte del Wu Tang Clan, sí. ¿Cómo? Aunque no hay detalles confirmados de la formación que aterrizará en Buenos Aires, sí se sabe que vendrán con Raekwon al frente, y que pasarán apenas un día en la Argentina (hay otra fecha confirmada en Santiago de Chile, y posibilidades de shows en Brasil, Colombia o Venezuela). La concreción de semejante visita no tiene que ver específicamente con una razón económica sino con la filmación de un documental que los monjes shaolines del hip hop están realizando y para el cual les interesó tal exótica locación. Todo un acontecimiento: justo este año, Wu Tang Clan volvió a reunirse para salir de gira promocional de un CD y un DVD titulados Disciples of the 36 Chambers, y RZA está dando los toques finales de un libro titulado The Wu Tang Clan Manual.