DIEZ RECOMENDACIONES DEL NO
Festival
(1) Trouble Every Day, de Claire Denis (Francia). Vincent Gallo y Beatrice “Betty Blue” Dalle de protagonistas, y la música de Tindersticks para una película shockeante, re-escritura científica del mito del vampiro, narrada a cuentagotas y con mucho para descubrir. Si vas a ver una sola película del Festival, que sea ésta. (Viernes 19, a las 12, Cosmos; domingo 21, a las 22, Abasto 10; martes 23, a las 17.15, Abasto 11.)

(2) What time is here?, de Tsai Ming Liang (Taiwan). Cuarto opus de la particular saga familiar de Tsai, el Truffaut de Taiwan. Una obra maestra zen, preñada de soledad y un extraño sentido del humor, que emociona por su sencillez y su historia de viajes, reencarnaciones, cucarachas y relojes. (Viernes 19, a las 15.30, Abasto 10; martes 23, a las 14, Abasto 8.)

(3) Tape, de Richard Linklater (Estados Unidos). Un cuarto, tres personajes, un drama. Menú alternativo por excelencia, rodado casi en vivo, como si lo que se cuenta fuese real y su registro cinematográfico un documental de los hechos. Yang narrativo del ying reflexivo que resulta Despertando a la vida, recién estrenada. (Sábado 20, a las 17, Sala Lugones; lunes 22, a las 23.30, Abasto 11.)

(4) A Skin Too Few: The Days of Nick Drake, de Jeroen Berkvens (Holanda). Pequeño documental sobre el músico de culto más oculto de la historia, del que apenas si existe algún registro cinematográfico. Su autor es un cineasta que se recibió con un documental sobre Sly Stone. (Viernes 19, a las 23.15, Abasto 8; sábado 20, a las 22.30, Cosmos.)

(5) Sauvage Innocence, de Philippe Garrel (Francia). Film de amor trágico sobre un cineasta que quiere hacer una película contra la heroína y debe financiarla vendiendo precisamente heroína. Una rareza en blanco y negro de un director que supo ser amante de Nico, por lo que conoce el tema. (Viernes 19, a las 14.30, Lugones; domingo 21, a las 17, Lugones; martes 23, a las 22.30, Abasto 11.)
(6) Dead or Alive 2: Birds, de Takashi Miike (Japón). Quienes recuerden el primer Dead or Alive o el “kirikirikiri” de Audition, saben que todo es posible en los films de Miike. Esta viene de acción, pero también hay dos más: Agitator y The Happiness of the Katakuris. (Sábado 20, a las 24, Abasto 9; lunes 22, a las 22, Abasto 9.)

(7) El empleo del tiempo, de Laurent Cantet (Francia). Ganador del Festival con su formidable opera prima Recursos humanos, Cantet regresa a Buenos Aires para presentar un film sobre un tipo que no tiene trabajo pero... le hace creer a todos que sí lo tiene. (Viernes 19, a las 16, Abasto 7; sábado 20, a las 16.30, Abasto 6.)

(8) Invasión, de Hugo Santiago (Argentina). Como parte de una completa retrospectiva dedicada a la obra de este cineasta argentino exiliado en Francia, se presenta su mítico film con guión de Borges que narra la inminente caída de una Aquilea bastante parecida a Buenos Aires. (Jueves 18, a las 20.30, Malba; viernes 19, a las 20, Malba; sábado 20, a las 15, Malba.)

(9) Nuestros amigos de la Banca, de Peter Chapell (Francia). Estrenado hace dos años, este formidable documental sobre las negociaciones entre el FMI y el gobierno de Uganda aparece como increíblemente actual. Y forma parte de un implacable ciclo de documentales titulado “Globalización y Barbarie”. A prestarles mucha atención. (Viernes 19, a las 16.15, Lorca; sábado 20, a las 18.30, Lorca.)

(10) Late un corazón, de Raúl Perrone (Argentina). Un documental sobre un padre de familia de Ituzaingó, del que están ausentes las citas rockeras y las historias de amor. Para los fans del Perrone de siempre, hay una completa retrospectiva, que incluye la aún inédita Peluca y Marisita, con el actor policial Iván Noble. (Viernes 19, a las 21.45, Abasto 7; sábado 20, a las 14.15, Abasto 7.) MARTIN PEREZ


El 4º Festival Internacional de Cine Independiente comienza hoy y se extenderá hasta el domingo 28. Las entradas cuestan 4 pesos, salvo en el Malba y en la Lugones, que salen 3. Se exhiben más de un centenar de películas, éstas son apenas las humildes recomendaciones del No para el fin de semana. Para el jueves próximo prometemos diez más.

DUSCHER, BECKHAM, EL MUNDIAL...
Futbol, ¿juego limpio?
No debe compararse con el primero ni con el segundo gol de Diego en el ‘86, ni con los gestos de Rattín en el ‘66, ni siquiera con la avivada del Cholo Simeone en el ‘98. Pero el doble planchazo de Aldo Duscher a David Spiceboy Beckham en el partido Manchester-La Coruña de la semana pasada, se coloca en el Top-5 de las grandes anécdotas futbolísticas entre Argentina e Inglaterra. Veamos el replay: vuela Aldo, los ojos bien abiertos, las piernas bien altas, los tapones al viento; y ya todos sabemos el resultado: el fantástico –y hypeadísimo– volante de la selección inglesa se fractura un mes antes del Mundial... Y parece que se queda afuera del partido contra Argentina, justamente. Siguieron las suspicacias (lo rompió a propósito), los antecedentes (¿acaso Bilardo no mandó a “marear” a Branco en el ‘90?), el enojo (cierta prensa inglesa agita la palabra “animals” otra vez), los paños fríos (el DT del Manchester dijo que no hubo mala intención), la diplomacia (Aldo llama a David para disculparse), la nobleza deportiva (Bielsa dice que prefiere que Beckham pueda jugar), los revisionismos (el foul fue en el pie derecho, pero la lesión está en el izquierdo) y el supuesto final feliz (se habla de “asombrosa y rápida recuperación”). Todo OK, Beckham es un fenómeno, el Mundial sale beneficiado si él puede jugar, ganarles con él en la cancha será todavía mejor, Duscher se zarpó, etcétera. Sin embargo, está claro el hincha maldito que habita dentro de todo futbolero argentino habrá esbozado una sonrisa pícara. ¿Está bien? ¿Está mal? El fútbol todo lo puede... J.A.

LOS FANS DE CALAMARO OPINAN
Contra la corriente
La última aparición pública de Andrés Calamaro –dos domingos atrás, en Plaza de Mayo, en el recordatorio convocado por las Madres por los 26 años del golpe militar–, captada por las cámaras de Crónica TV y luego presentada por “TV Registrada” como “un reportaje de alto vuelo”, provocó más de una reacción. Allí se lo veía en un fallido intento de entrevista en el que sólo musitó, a modo de respuestas, palabras como “sala de ensayo, rock y estupefacientes”. Dicha críptica aparición causó revuelo en los sitios en Internet de fans argentinos y españoles de Calamaro, donde se suceden acaloradas polémicas entre los que están preocupados y los que lo defienden, encarnados también como los viejos fans de Los Rodríguez vs. los sal(o)mónicos fans de la ruta contra de la corriente. Aquí, algunos de los pasajes vertidos por los calamarófilos en calamaro.metropoli2000.com:
“No todo es bueno por ir contra la corriente, menos si nosotros somos esa corriente, los que esperamos algo que no llega” (Lisandro M.). “Me gustaría que fuera un poquito más comercial, como lo era en los tiempos de Alta suciedad. Propaganda, merchandising, recitales, etcétera... Lo vi en TN. O yo soy muy boludo o él estaba tan drogado que no se le entendía un carajo lo que decía” (Nacho). “¿Para qué quieren que sea comercial? ¿Para enterarnos de que se volteó a Julieta Ortega? Todos nuestros próceres están en un mal momento: Andrés, Charly, Fito, el Flaco, Sabina... Lo loco es la falta de recambio que hay en nuestra música, parece la clase política. ¿A quién vamos a escuchar? ¿A Bochatón? ¿A Leo García?” (El Porteño). “Calamaro está en estado deplorable. Lo vi en una nota cuando fue a Plaza de Mayo y no podía hablar. Nadie le pide que nade a favor de la corriente; que siga en contra, pero que se ponga las pilas. Con las drogas no se jode: miren al Diego, a Charly, o al pelotudo de Andy Chango. Andrés está hecho mierda y realmente me asusta. Hoy prendí la Rock & Pop y estaban pasando ‘El salmón’, y me asusté pensando que cuando terminara la canción iba a aparecer Pergolini diciendo: ‘Se murió Calamaro’” (Gustavo Fiumano). “¿Que Andrés está hecho mierda porque fue colocado a la Plaza? ¿Quién está más hecho mierda, alguien que va colocado a apoyar una causa noble o alguien que se caga en todo y ni aparece por esos pagos?” (Gustavo Grabacionesencontradas). J.A.