El tema abre un abanico de contradicciones para el espiritual (y virtual) espacio del rastafarismo en la web. Pero en Internet uno encuentra soluciones para todo. Por ejemplo: los piojos dentro de las rastas. Una vez que llegan al cuero cabelludo, vaya si tienen lugar para hacer verdaderas colonias de vacaciones, rascacielos y subibajas, para las futuras liendrecitas que compartirán tanto reggae, tanta pasión, tanta macoña. La Secretaría de Grandes Temas del NO investigó (aunque en foros de dudoso cientificismo) mecanismos, recetas y consejos para invitar a los piojos hacia otro cuero, un problema del cual los skinheads (otra tribu por cierto antagónica) carece.

El miembro de la comunidad rasta DanyNegast expone su problema en uno de esos foros (basta googlear): “Decidí hacerme los dreadlocks, con profundo respeto, pero me infecté piojos y está muuuy difícil. Porque si se enteran en mi trabajo no lo tolerarán, ¡y la verdad que ya me molesta demasiado!”. Lo curioso fue la variada elaboración de respuestas. BeTa propuso la inundación de vinagre: “Mojate la cabeza con vinagre, ponte una bolsa plástica en la cabeza y dejala por 20 minutos. Se supone que funciona porque cambia el ph de tu pelo y los piojos mueren. O se van. No sé muy bien la explicación, se me olvidó, pero funciona”. Y cita a Marcus Garvey: “Lucharemos hasta que el color de la piel no sea más importante que el color de los ojos”. Negus_Calvin también cree que los “lokillos” se mueren después de una media hora de vinagre. Ursula dice que haga lo que sea, “pero que no se corte los dread”.

Un tal Bless propone usar propóleo, un derivado de la miel “de las abejillas, muy bueno para los dread”. No se entiende bien si el derivado sirve para evitarlos o para invitarlos. Como sea, la propuesta de Deft es superadora: “Usá plantas olorosas, flores, cuando descanses, y los piojos se molestan con el olor y se mueren o marchan”. La otra opción es hacer un sahumerio de marihuana cerca del pelo, repetirlo tres o cuatro veces por semanas, y Deft asegura que “los piojos se mueren intoxicados o se largan” (o se ríen). Y firma: “Esperemos el día fuera de Babylón”. DanyNegast duda de la eficacia del vinagre: “Sirve para que no te contagien, pero no los mata, y si se van, ¿pa’ dónde se van?”. Ante la desesperación, alguien propone la parafina: “A mi hermano le echaron cuando era chico y le resultó”. Sistandrea propone: “No se korte sus dread ya k son su korona, pero prueve kon cuasia, es tan amarga k se van. A mi hermana le funcionó, aunque no tenía dread” (sic).

Sista_vale no luchó demasiado. “Tenía dread y piojos a la vez, es un poco molestoso, no hice mucho para eliminarlos ya que aunque son muy molestosos tengo un rollo bien grande con el matar (sea a los piojos, animales mayores). Si no tiene drama con eso, póngase aloe vera en el casco cada vez que se acuerde”. Efusión dice que leyó que “cuando uno fuma ganJah (marihuana) en el casco se forma un líquido que mata los piojos”. Es probable que los piojos no se vayan, pero al menos uno los olvidará, o los verá crecer con amor y compasión. Finalmente, DanyNegast encontró una solución. Fue a una farmacia, compró Palo Amargo, puso una bolsita en alcohol etílico durante 24 horas. Con algodón fue mojando en la cabeza, y tres horas después se bañó. Se fueron el 80 por ciento de los piojos. Dice que en tres días se le van las liendres. ¡Ay... pica de sólo leer!