INEVITABLES
Con el subtítulo Ubú Patagónico, se estrena la segunda pieza del Ciclo Invocaciones, esta vez dirigida por Mariana Chaud. La obra está compuesta por dos o tres partes. La primera es una adaptación entre mil comillas de Ubú Rey, el clásico del absurdo de Alfred Jarry. No existe un criterio unificado: las escenas son por momentos actuales, por otros medievales, de a ratos dramáticas, de a ratos sobrecargadas de gestos inútiles. La segunda parte abandona a Ubú en su esplendor como gobernante y se dedica a otros textos no teatrales de Jarry. Aparecen impresiones de la guerra de su novela más autobiográfica, Los días y las noches. También hay relatos y textos tomados de Gestas y opiniones del Doctor Faustroll Patafísico. Por último, el material desplegado es tomado prisionero junto a Madre Ubú por un grupo de indios patagones. Con Marcos Ferrante, Santiago Gobernori, Laura Paredes, Agustín Rittano y Fernando Tur.
Jueves, viernes y sábados a las 20, en el Centro Cultural San Martín, Sarmiento 1551. Entradas: $80; jueves, día popular, $60.
Una familia de un pueblo del interior. Supieron tener su momento de prosperidad y ahora subsisten, hambrientos pero indoblegables. Esta noche tienen invitados importantes, pero la heladera está rota y la carne regalada no aguanta bien con el hielo. De todas maneras, la cena se realizará a como dé lugar porque ellos están esperanzados. En el pueblo dicen que Ximena hace brujería, su hermano Oscar prepara una intervención anatómico-musical a partir del concepto de tela viva, y la tela viva es Milagros, su prima, su pareja, a quien somete a una rigurosa dieta para que dé con el tono exacto. El huesudo tiene los huesos como de vidrio, dicen que es una maldición por fornicar con parientes, y el Armando parece ser la salvación. ¿Hasta dónde seríamos capaces de llegar para saciar nuestros deseos? Dramaturgia y Dirección de Pablo Iglesias.
Sábados a las 20.30, Abasto Social Club, Yatay 666.
Entrada: $100.
Según cuenta la historia oficial, los conciertos de Queen en el Rainbow londinense habían sido grabados para editarse en forma de disco, pero fueron postergados ante la contundencia de Una noche en la Opera, el disco que comenzó el camino del grupo de Freddie Mercury y Brian May hacia la leyenda. Incorporado a la discografía oficial cuarenta años más tarde, este flamante Live at the Rainbow retrata a Queen antes del gran salto, una banda pomposa y contundente, pero que estaba lejos de la amplitud compositiva y melódica de sus trabajos posteriores. No uno, sino dos son los conciertos que incluye este disco que testimonia el paso del grupo por el Rainbow. En el primer disco del álbum doble se incluye un show de marzo del ‘74, de la gira presentación de Queen II, y el segundo es el concierto de noviembre, correspondiente a su sucesor, Sheer Heart Attack, que los presenta en toda su gloria, algo que previamente se podía atisbar en el disco de sus grabaciones para la BBC, del año ‘73. Pero el Rainbow, obviamente, es otra cosa. Infaltable para los fanáticos, y para que se asomen los que crean conocer a Queen, pero nunca escucharon esta época del grupo.
Producido artísticamente por el Area de Música del Centro Cultural de la Cooperación y presentado el mes pasado dentro del marco de la campaña nacional Paremos la Trata, organizada por el Comité Ejecutivo para la Lucha contra la Trata y Explotación de Personas, Se trata de nosotras es un compilado que no discrimina por géneros, integrando folklore, cumbia y rock. Desde Liliana Herrero hasta 34 Puñaladas —el único grupo masculino del trabajo—, incluye temas de Sol Pereyra, Añika, Ana Prada, Tonolec y Miss Bolivia, entre otras intérpretes, deviniendo en casi un catálogo de una cierta escena actual, independiente y femenina.
Con casi cuarenta años de carrera y cerca de una veintena de películas (entre ellas grandes éxitos como Los Cazafantasmas, Gemelos y Un detective en el Kinder), Ivan Reitman ha reducido la frecuencia de sus estrenos pero no la puntería, como bien prueban los últimos tres: Mi súper ex novia, Amigos con derechos y ahora la gran Draft Day, que no pasó por los cines locales. Kevin Costner interpreta al manager de los Cleveand Browns en esta película de deportes pero que no hace foco en el juego y la competencia, sino en la cacería de nuevos talentos, la burocracia y el enorme negocio de la Liga Nacional de Fútbol norteamericano; un género que en los últimos años han explotado muy bien Moneyball, con Brad Pitt, y Las curvas de la vida, con Clint Eastwood. El draft day del título es el día de reclutamiento, la jornada anual en la que los directivos de los equipos negocian cuáles serán sus estrellas para la siguiente temporada. Para Costner –un duro y un clásico– se trata de un juego repleto de cálculos, engaños y trampas. Lo acompañan muy bien en el reparto Jennifer Garner, Denis Leary, Frank Langella y Ellen Burstyn.
Fue odiada por la mayor parte de la crítica estadounidense, pero conviene echarle un vistazo, cuando menos por la siempre graciosísima Melissa McCarthy y su humor proclive a los excesos y la guarrada. Tammy ha pasado por un día verdaderamente terrible, en el que perdió su auto, su empleo en un local de comidas rápidas y a su novio (a manos de su vecina, interpretada por Toni Collette). Pero donde otros hubieran filmado un drama sobre las mediocres tragedias de la mediana edad, McCarthy –que viene de hacer Bridesmaids, Armadas y peligrosas y Ladrona de identidades– se lanza a una aventura salvaje, un road trip absurdo en el que arrastra a la abuela borracha que interpreta, en un cambio de registro inusual, Susan Sarandon. Están por ahí Kathy Bates y Sandra Oh y Dan Aykroyd, y esta tampoco pasó por los cines.
Cuando murió, hace apenas unos meses, con casi 91 años de edad, hacía bastante que no se lo veía en el cine, y por lo tanto para muchos espectadores más o menos jóvenes no era otro que el vital viejo que había financiaba el demencial y megalómano parque de dinos en Jurassic Park. Pero lo cierto es que Lord Richard Attenborough (1923-2014) tuvo antes de eso una carrera larguísima y muy exitosa, que incluye setenta y nueve títulos como actor, entre series y películas, doce como realizador (entre los que se destacan las superproducciones Un puente demasiado lejos y Gandhi) y trece como productor. El ciclo con que lo homenajea el BAC arranca pasado mañana con Al filo del abismo (Seance on a Wet Afternoon, Bryan Forbes, 1964). Seguirá los martes próximos con Brighton Rock (1947); Un puente demasiado lejos (1977), y Magia (1978), basada en la novela de William Goldman y con un joven Anthony Hopkins en el papel de un ventrílocuo siniestro. Gratis.
Los martes de octubre a diciembre a las 17, en el British Arts Centre, Suipacha 1333.
El próximo 30 de octubre llega Halloween y con esta celebración importada arranca una vez más el festival de cine de género fantástico y de terror independiente más grande de Latinoamérica. Se trata de la edición número quince y con ella la muestra se expande de los siete días de siempre a un total de once. Habrá tres competencias simultáneas de largometrajes: la Internacional es un panorama del cine de género de todo el mundo, con títulos como, entre otros, las argentinas Naturaleza muerta (Gabriel Grieco), El desierto (Christoph Biehl) y Corazón muerto (Mariano Cattaneo). En la Iberoamericana se cruzarán varias locales, como Jorge y Alberto contra los demonios neoliberales (Gonzalo y Hernán Quintana). Y debuta también la Competencia Bizarra, metiéndose entre las producciones más extrañas y divertidas del mundo. Más información en www.festivalrojosangre.com.ar
Del 30 de octubre al 9 de noviembre, en el Complejo Monumental, Lavalle 836.
A lo largo de este mes y los próximos dos, HBO estrenará una serie de grandes documentales a razón de uno por lunes. Mañana será el turno de uno de los más interesantes de la selección: Love Child, dirigido por Valerie Veatch y centrado en la adicción a los videojuegos online. Love Child parte del caso real de una pareja en Corea del Sur que fue juzgada en el año 2010 por la negligente muerte de su pequeña hija de tres meses, adjudicada a su obsesión por el juego. Le seguirán Red Obsession (3 de noviembre), que aborda el nuevo fenómeno del consumo de vino en China; The Newburgh Sting (10 de noviembre), acerca de cuatro musulmanes involucrados en un caso terrorista en 2009; Captivated: The Trials of Pamela Smart (17 de noviembre), sobre una mujer que conspiró junto con su amante y tres amigos para matar a su esposo. Luego vendrán los del padre de Robert De Niro (ya anticipado en este suplemento) y el de Lance Armstrong.
Lunes, a las 22, por HBO.
Dibujos animados raros ya no hay, no porque todos sean convencionales, sino porque después de que las puertas de la percepción quedaran abiertas por Los Simpson, South Park y Ren & Stimpy ya nada es realmente raro; acaso los dibujitos sean hoy el espacio más libre y lisérgico de la televisión. Así que ahí se consolidan las obras maestras del día como Hora de aventura y Un show más (Cartoon Network) y se suma, construyendo su culto de a poco, BoJack Horseman, una suerte de sitcom dibujada sobre una ex estrella de sitcoms que resulta ser un caballo, premisa que da pie a una filosa crítica sobre la industria del entretenimiento. Una creación de un tal Raphael Bob-Waksberg interpretada (en las voces) por grandes comediantes como Will Arnett, Amy Sedaris y Patton Oswalt, que se permite ser un poco triste. Y eso, sí, es una rareza en materia de animación.
Por Netflix
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