Peculiar casualidad que, tras haber catapultado su carrera solista en 2004 gracias al tema “Breathe Me” (en castellano “Respírame”), la cantante y compositora australiana Sia Furler alcance hoy los titulares por respirar en un frasco y subastar su aliento. Sí, sí, así es: una década más tarde y con el noble fin de dar un empujoncito financiero al Festival de Cine de Adelaida, su ciudad natal, la otrora vocalista del grupo Zero 7 embotelló suspiro y lo cedió con intención de que la organización recaudara unos billetes. “Preciosa y magníficamente, Sia sopló en un jarro Mason para nosotros”, destacó la ¿orgullosa? directora del evento, doña Amanda Duthrie, revelando además que el contenedor a elección de la artista fue “sellado con cera para que nadie lo abra accidentalmente”. “Quienquiera que gane podrá romper el inviolable o dejarlo ser”, agregó, para más especificaciones. Innecesarias, valga el subrayado.

Con todo, la ocurrencia de rematar un (literal) soplo de vida de la detentora de cantidad de álbumes, incluido el más reciente 1000 Forms of Fear, es notablemente más tentador que otros ítem que estarán a disposición de billeteras interesadas. Porque, además del adminículo relleno de... nada, los asistentes podrán pujar por un rol de extra en el venidero film de Anthony LaPaglia, A Month of Sundays, a rodarse en Adelaide el año próximo, o por ser el “icónico payaso del Credit Union Christmas Pageant” el próximo noviembre. Con tamaños premios, mejor optar simplemente por ver las películas a disposición.