El gobierno de Hermes Binner enviará antes de fin de año a la Legislatura el proyecto de adhesión a la nueva ley nacional de tránsito que la Presidencia reglamentó la semana pasada. "Todavía no se publicaron los anexos que son la base de la reglamentación pero se avanzó con la decisión política", aclaró la titular de la Agencia Provincial de Seguridad Vial, Hebe Marcogliese. La funcionaria estimó que la implementación del carné por puntos en Santa Fe demandará "al menos dos años" y confirmó que una vez aprobada la norma volverán a funcionar los cuestionados cinemómetros móviles en las rutas santafesinas, en reemplazo de los fijos establecidos en la Ley de Radares provincial. "Somos la única provincia que tenemos este tipo de control de velocidad que ha demostrado no ser efectivo. Lo que hay que hacer en realidad es garantizar transparencia de su funcionamiento para evitar las suspicacias en torno al mentado afán recaudatorio", sostuvo.

El jueves último se publicó en el Boletín Oficial la reglamentación de la nueva ley de tránsito y seguridad vial aprobada en abril por el Congreso. La norma establece, entre otras cuestiones, la creación de un registro unificado de licencias de conducir, el carné por puntos y prohíbe la venta de bebidas alcohólicas en comercios lindantes con rutas y autopistas. Además se incorporan nuevas faltas graves a la ley de tránsito (24.449), como la conducción en estado de intoxicación alcohólica, manejar utilizando auriculares, celulares y pantallas o monitores de VHF o DVD, la violación de los límites de velocidad y transportar más ocupantes de lo que permite la capacidad del vehículo.

"Se publicó la reglamentación pero sin los anexos que son la base. Hasta tanto no tengamos esa información no vamos a poder terminar de armar nuestro proyecto de adhesión a la norma, que igualmente lo tenemos bastante avanzado. La idea es enviarlo a la Legislatura para que sea tratado a lo sumo en las sesiones extraordinarias", comentó la titular de la Agencia Provincial de Seguridad Vial en diálogo con Rosario/12.

En ese sentido la funcionaria remarcó que "lo más importante es la coordinación de tareas junto con otras jurisdicciones. En la actualidad estamos trabajando con los gobiernos de Córdoba, Entre Ríos, Buenos Aires y la Capital Federal para unificar criterios, evitar superposiciones y avanzar en la complementariedad logística. De nada sirve que una provincia sea estricta en los controles viales y una localidad vecina haga todo lo contrario".

Marcogliese estimó que las principales novedades de la ley de tránsito comenzarán a aplicarse en Santa Fe "dentro de no menos de dos años. Nosotros ya estamos trabajando y nos encontramos con muchas dificultades, como por ejemplo comunas que no tienen computadoras ni correo electrónico para poder sumarse a la base de datos".

Al mismo tiempo, la funcionaria confirmó que una vez aprobada en la Legislatura la adhesión a la ley nacional de tránsito, volverán a instalarse radares móviles en las rutas santafesinas. "Hasta ahora la ley provincial lo prohibía, sólo permitía fijos, pero al sancionarse una nueva norma, que en realidad implica adherir a una normativa superior, del orden nacional, queda sin efecto", explicó Marcogliese para quien "lo fundamental es garantizarle a los automovilistas el correcto funcionamiento de los aparatos, su debida homologación y despejar dudas sobre el tan mentado afán recaudatorio".

De cara al año próximo la ex directora de Tránsito de Rosario dijo tener la expectativa de contar con los fondos necesarios para poder "armar un cuerpo de agentes de seguridad vial propios, que como mínimo debieran ser 500 personas para poder controlar debidamente las rutas que atraviesan la provincia". Al respecto Marcogliese apuntó que los controles de alcoholemia en los caminos provinciales continuarán haciéndose, con tests que han arrojado en promedio 10 por ciento de resultados positivos.