Un año después de haber encabezado una fracasada ronda de consulta tendiente a reformar la Constitución provincial, el ministro de Gobierno, Roberto Rosúa, anunció ayer que a mediados de febrero convocará a todos los partidos políticos para, entre otros temas, reflotar el proyecto reformista. El funcionario provincial dijo estar abierto a analizar las modificaciones que proponga la oposición en aras de arribar a "un consenso para mejorar la calidad institucional de la provincia". Radicales y socialistas consultados por Rosario/12 pusieron como condición indispensable para avalar la convocatoria a una Asamblea Constituyente que el temario incluya cambiar la mayoría automática que la actual Carta Magna le asigna al gobernador electo en la Cámara de Diputados. "Ese punto el PJ no lo va a someter a discusión", aclaró Rosúa, quien no obstante ello se mostró optimista sobre la posibilidad de lograr la reforma constitucional en el 2006 con la incorporación de la autonomía municipal, la reelección del gobernador y vice y mecanismos de democracia semidirecta.

El ministro de Gobierno reiteró a Rosario/12 los conceptos vertidos por la mañana a Radio Dos. Allí informó que a mediados del mes próximo la Casa Gris convocará a los principales referentes de los partidos políticos de Santa Fe. "La razón principal es para cumplir una promesa preelectoral del gobernador: analizar la aplicación del nuevo sistema electoral en la provincia. Vamos a escuchar las sugerencias que nos hagan para perfeccionar la Ley de internas, abiertas, simultáneas y obligatorias (que reemplazó a la Ley de Lemas)", precisó el funcionario.

"No se me escapa -continuó Rosúa- que en ese marco de diálogo político los dirigentes de la oposición pueden llegar a plantear la necesidad de reformar la Constitución que para nosotros es un tema prioritario", sostuvo para luego recordar que el Poder Ejecutivo remitió "hace varios meses" a la Legislatura un mensaje propiciando modificar la Carta Magna provincial en algunos aspectos específicos.

Rosúa remarcó que la intención del gobierno "es mejorar la calidad institucional de la provincia, adaptando la Constitución provincial a la nacional reformada en 1994". La Casa Gris propone incorporar la autonomía municipal, darle rango constitucional al Consejo de la Magistratura, a la Fiscalía de Investigaciones Administrativas, la reelección del gobernador y vice -excluyendo al mandatario en ejercicio- y ampliación de la duración de los mandatos de los presidentes comunales.

Consultado por este diario, el titular de la UCR santafesina, el senador Felipe Michlig aceptó la invitación. "Somos reformistas por naturaleza, estamos de acuerdo en reformar la constitución. No estamos de acuerdo con las metodologías que propone el gobierno. Creemos que (la provincia) debe convocar al diálogo con cautela, responsabilidad y seriedad sin un paquete cerrado", sostuvo el legislador santafesino.

"Para el radicalismo -agregó- la eliminación de la mayoría automática en la Cámara de Diputados es indispensable para que sea viable la reforma. Lo decimos pese a que vamos a llegar al gobierno en el 2007 con el Frente Progresista. La diferencia es que nosotros somos proclives al consenso".

El diputado socialista Raúl Lamberto formuló un planteo similar. "Nosotros le entregamos en su momento al ministro un proyecto integral de reforma constitucional que no se limitaba a los siete puntos del mensaje de Obeid. Cambiar la composición de Diputados es imprescindible como también eliminar la aprobación tácita de pliegos de jueces sin aval legislativo, la incorporación del Ministerio Público extrapoder y la consagración de la autonomía municipal. El PJ no puede proponer un temario acorde a sus necesidades sino de toda la sociedad", indicó.

Al respecto Rosúa fue tajante: "El PJ no aceptará incluir en la reforma una modificación al esquema de distribución de bancas. Es una posición que privilegia la gobernabilidad por sobre otros valores", remató.