Un grupo de familiares y pacientes santafesinos, que figuran en lista de espera para ser trasplantados, reclamaron al gobierno de la provincia que se lleven adelante políticas activas para incentivar la donación de órganos, debido a que "en los últimos cinco años descendió en la provincia, la tasa de donantes reales por millón de habitantes, que es la más baja de los últimos siete años". Tras una reunión con la vicegobernadora Griselda Tessio, los representantes del grupo le plantearon su preocupación por el descenso en las cifras de donaciones de órganos en Santa Fe, desde 2003. La funcionaria prometió gestionar un encuentro entre los pacientes y el Ministro de Salud santafesino, Miguel Angel Capiello, "para analizar las causas del problema y lograr revertir la tendencia negativa".

La información surgió de un comunicado de Armando Perichón, actual interventor de la delegación local de Pami, que fue durante años el director del CUDAIO (Centro Unico de Ablación e Implantes de Organos) y también dirigió el organismo nacional INCUCAI.

Según los datos recabados por los pacientes y familiares, en 2003 la tasa fue de 8,93 donantes reales por millón de habitantes. "El guarismo se incrementó incluso hasta 2005, cuando alcanzó la cifra histórica de 11.96 por millón: pero luego fue decreciendo hasta 2009, en que llegó a 8,88, aún menor que el de 2003".

Los pacientes plantearon que el trasplante es la "única esperanza" para las personas que figuran en lista de espera. Además, Perichón explicó: "Sólo el uno por ciento de los fallecimientos es apto para la donación de órganos con fines de trasplante, ya que deben producirse por causas que no afectan a los órganos a trasplantar, a partir de la muerte cerebral".