En dos semanas, el Frente Progresista impulsará en Diputados la aprobación del sistema de boleta única para las elecciones provinciales. "Es una herramienta sencilla que elimina la lista sábana, aleja el escenario de robo de boletas y la posibilidad de fraude", destacó el impulsor de la propuesta, el legislador arista Pablo Javkin. De aprobarse la iniciativa, para cada cargo electivo el elector recibirá un cuerpo único con todos los candidatos y sus fotos y un casillero para marcar su preferencia, incluso el voto en blanco. Para las candidaturas legislativas aparecerán los tres primeros nombres y el resto en una afiche que se desplegará en el cuarto oscuro. Un sector del PJ analiza acompañar el proyecto, apoyo que será vital luego en la discusión en el Senado donde la coalición oficialista es amplia minoría.

Previo a la última sesión de la Legislatura, Javkin accedió al pedido de distintos diputados justicialistas, quienes solicitaron unos días para analizar su propuesta. "El compromiso es tratarlo en quince días para tener en cuenta eventuales modificaciones que proponga la oposición", confió el diputado de la Coalición Cívica.

Uno de los solicitantes, el kirchnerista Luis Rubeo aclaró a este diario que su sector "aún no tiene una posición fijada, por eso pedimos unos días para leer el texto". De todas formas reconoció que "no lo vemos muy viable. Una cosa es una elección a presidente, otra cuando por ejemplo en 2011 tendremos en Santa Fe comicios a gobernador, intendente, diputados, senadores departamentales y concejales. Serán muchas boletas únicas y además para los cargos legislativos sólo aparecerán los primeros. No sabemos tampoco que pasará en las primarias donde en 2009, sólo en Rosario tuvimos 26 listas a concejales".

Consultado sobre uno de los argumentos planteados por Javkin para impulsar la iniciativa, vinculado a la atenuación del riesgo de fraude, Rubeo relativizó el planteo: "La verdad es que últimamente quienes denuncian que faltaron boletas y de allí instalan el fantasma del fraude después no lo llevan a la Justicia, porque teniendo fiscales en todas las mesas es díficil que haya grandes irregularidades".

El reutemista Jorge Lagna también pidió unas jornadas para estudiar el expediente. "Conocí el sistema como veedor internacional en Colombia. Allí funciona muy bien para la elección a presidente y vice, y tiene alguna dificultad para los cargos legislativos donde rige un sistema mixto, donde los electores definen también la posición del candidato y todavía están con el escrutinio. A título personal me parece una opción muy interesante, que de todas formas, creo debiera discutirse de manera más integral con todos los elementos propios de una elección".

Lagna fue más allá al advertir que a su entender "estamos demasiado cerca de las próximas elecciones como para implementar cambios tan sustanciales. En Colombia cuando se hicieron esas modificaciones, previamente hubo una intensa campaña educativa. Acá hace falta una gimnasia muy intensa para que los electores estén al tanto, tengamos en ceunta que cerca del 70 por ciento de los votantes llega al cuarto oscuro con el voto en sus manos, repartido por la militancia".

Para Javkin, "las ventajas del sistema son muchas y evidentes. Por un lado reduce las posibilidades de fraude y el robo de boletas, ya que hay una sola para todos los partidos. Se evita también el 'voto cadena', ya no puede haber entrega anticipada de boletas puesto que la impresión pasa a ser responsabilidad del Estado, quien las provee el día de la elección. Esto tiene dos beneficios: por un lado, una notable reducción del gasto electoral, ya que se evita la impresión de millones de boletas por parte de cada partido pasando a imprimirse un número apenas superior al de electores; y por otro, se respeta la igualdad entre partidos chicos y grandes, puesto que la Justicia Electoral se convierte en el garante de que la ciudadanía pueda elegir entre todos los candidatos, aunque algún partido no tenga fiscales en esa mesa".

Según el legislador, con la boleta única "se evitan los efectos de las 'listas colectoras' y tampoco se dará el 'efecto arrastre' de una categoría superior a una inferior. Es también el fin de la lista sábana horizontal, lo cual resulta vital si se reconoce que las realidades nacionales, provinciales y locales son diferentes".