El Defensor del Pueblo, Edgardo Bistoletti solicitó ayer la "inmediata remoción" del anuncio publicitario del resto bar De puta madre de la ciudad de Santa Fe, basado en la violencia simbólica prevista en la ley integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra la mujer. El funcionario pidió la intervención de la municipalidad de Santa Fe al considerar que el afiche (foto) "representa una ofensa para las mujeres". La decisión surgió de "una serie de reclamos por parte de algunas ONG que trabajan por los derechos de las mujeres, instituciones y personas particulares". El cartel publicitario de gran tamaño se encuentra en la vía pública y en él se puede ver a una mujer arrodillada, con el pecho desnudo, lamiendo miel en un plato de sushi con los ojos cerrados, mientras una mano (que parece masculina) derrama el dulce con una cuchara. Bistoletti lamentó: "No hay una sanción que se pueda aplicar al dueño del lugar, ni al municipio; sino que es simplemente una recomendación, porque hay ciudadanos que se han quejado por lo que se ve en la publicidad y esto ofendió a las mujeres". Al mismo tiempo, Bistoletti sugirió que se revise la habilitación del local y que se analice el cambio de denominación.

En tanto, en el local de 25 de Mayo 3428 de la capital provincial, Freddy, gerente de Relaciones Públicas, dijo que su abogado les recomendó "no hacer declaraciones". La nota con el pedido de remoción fue entregada directamente al intendente Mario Barletta, quien "ahora debería definir qué hacer con ese pedido girado por la Defensoría ante los reclamos que le llegaron", dijo el titular, quien destacó que la publicidad tiene un mensaje "sesgado, desvalorizante e injurioso hacia la mujer. Es agraviante y atenta contra su dignidad, vulnerando valores y derechos consagrados en la ley", estimó. En tanto, el gerente de Relaciones Públicas aseguró no saber si se removerá o no el afiche de la vía pública.

El anuncio "agraviante" publicita el "night club, fucking restó, sushi

bar, finger food"; mientras que en el gráfico de fondo se muestra la imagen de una mujer de rodillas, lamiendo de un plato donde alguien derrama miel. Para el defensor, el lenguaje verbal y visual son "congruentes" y pone "a la mujer como eje", representándola como "santa y demonio, como seductora, peligrosa y dadora de placer". Se la ve como "mujer-objeto, tentación peligro. Devora y es devorada". Estereotipos que para la Defensoría "se complementan con los masculinos: poder, posesión, dinero, potencia y rendimiento".

La ley que infringe el cartel publicitario usando a la mujer como "objeto de poder", es la número 26.485 de "Protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres en los ámbitos en que desarrollen sus relaciones interpersonales". La normativa define como violencia "toda conducta, acción u omisión, que de manera directa o indirecta, tanto en el ámbito público como en el privado, basada en una relación desigual de poder que afecte su vida, libertad, dignidad, integridad física, psicológica, sexual, económica o patrimonial, como así también su seguridad personal".

Además, establece cinco tipos de violencia, entre los cuales figura la de este caso: la simbólica. Se define como la que "a través de patrones estereotipados, mensajes, valores, íconos o signos transmita o reproduzca dominación, desigualdad y discriminación en las relaciones sociales, naturalizando la subordinación de la mujer en la sociedad".

Ante los reclamos, Bistoletti sugirió, además de la remoción del anuncio de todo el espacio público, "la revisión del permiso de habilitación del negocio, y su cambio de denominación".