"Paraguayita, bebota, nuevita, recién llegada". El texto, con muy pocas variantes, puede leerse en los clasificados promocionados como servicios para el hombre y la mujer en distintos medios gráficos de la provincia de Santa Fe, al igual que en el resto del país. La posibilidad de publicar, o de anunciar en radio y televisión, sin ningún tipo de responsabilidad social, es la que tomó como objeto de trabajo la diputada por el SI Alicia Gutiérrez para poner en debate las situaciones que devienen en trata de personas, y otras que tienen que ver con la exaltación y difusión del proxenetismo, un delito como el que comete quien oficia de proxeneta. A partir de allí propuso que esos medios de comunicación no cuenten con publicidad oficial, que el Estado cumpla con su también responsabilidad en el tema, y que lo hagan además los medios. Por eso elaboró un proyecto de ley que se presentará esta semana en la Legislatura provincial para regular el marco que deben tener los medios que aspiren a contar con los avisos provinciales. El proyecto de ley de Alicia Gutiérrez fue acompañado con las firmas de las diputadas Lucrecia Aranda (PS), Mónica Peralta (UCR) integrantes del Frente Progresista Cívico y Social, y Oscar Urruty (PPS).

Alicia Gutiérrez había presentado el año pasado un proyecto que tenía que ver con lo que ella llama 'ofertas laborales engañosas' y pidió al Ministerio de Justicia y Derechos Humanos que interviniera de alguna manera, tal vez a través de la convocatoria a las empresas de la comunicación con la finalidad de trabajar para suprimir esos mentirosos espacios que venden espejos de colores y generan expectativas de encontrar un modo de vida que posibilite salir de la miseria. Cuando este año se cumplió un nuevo aniversario de la desaparición de la joven tucumana Marita Verón, Gutiérrez planteó que se declarara esa fecha como el Día Contra la Trata de Personas en el territorio santafesino de manera tal de reforzar la difusión de la brutalidad que supone este problema social y las acciones para llevar adelante acciones preventivas del que es un flagelo social. "Por un lado se difunden las fotografías de mujeres, en su mayoría jóvenes, niñas y niños en los distintos medios, pero en los mismos gráficos para el caso, se publica una oferta sexual importantísima y en los medios audiovisuales la oferta adquiere distintas formas...También en Internet existen páginas y páginas que cumplen esta finalidad".

Gutiérrez explica que si bien el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, así como el de Seguridad tomaron el tema de la trata, "tanto a nivel nacional como provincial no hay mucha experiencia en esta temática, pero sin lugar a dudas en todo el país y en la mayoría de los países del mundo el tema de la trata está muy vinculado siempre a funcionarios de la Justicia, a sectores políticos y a las fuerzas policiales que de alguna manera colaboran o miran para otro lado cuando esto sucede". Tanto la legisladora del SI como quienes la acompañaron con su firma pretenden dar al debate, junto a las organizaciones sindicales que nuclean a los trabajadores de prensa en la provincia.

Desde la ciudad de Avellaneda, en el norte santafesino, la médica Cristina Díaz, una referente del movimiento de mujeres, respalda el proyecto que espera "pueda llegar a ser una herramienta legal y jurídica para combatir esta forma tan degradante y terrible para la condición humana que es la trata de personas. Creo que en todos los puntos geográficos de la provincia existe el problema, en algunos no se exhiben los anuncios de manera tan descarada y se lo hace de forma subliminal. En otros sitios la publicidad es frontal".

La socialista Lucrecia Aranda explica que con el proyecto de Gutiérrez y con otros que puedan surgir, de otros legisladores pero en la misma dirección, se apunta a dar el debate, a poner en discusión la situación de estos "negocios", de "tratar de desnudar su verdadera naturaleza, en los que, en principio hay mujeres que voluntariamente se acercan a trabajar, para poder ver luego cómo se entra en una zona de grises donde hay mujeres en situaciones de trata. Mujeres muy jovencitas, mujeres migrantes son en general las víctimas y lo que nos ocupa no es una discusión de moralina, de aquello que tenga que ver con lo que hace la gente con su sexualidad, sino que el debate está centrado en el derecho de las personas".

Aranda, quien fue la primera directora del Area Mujer de la Municipalidad de Rosario dice que "es muy peligroso e hipócrita que como sociedad se cierren los ojos y no haya demasiada reacción, para el caso en que aparece, por ejemplo, el dueño del bar La Rosa, Juan Cabrera, quien se publicita como un empresario de la noche, y expresa que las chicas con él ganan 15.000 mensuales. ¡Nadie mira los diarios ni ve la televisión ni escucha la radio!. Habría que reflexionar sobre los medios, sobre la ética, el compromiso con los grandes problemas y sobre qué pasa cuando se difunden imágenes o textos que son denigrantes para las mujeres".