Más de 1400 jóvenes solidarios santafesinos participaron la semana pasada en el programa nacional "Florecen mil flores, pintamos mil escuelas". El proyecto llegó a más de 70 establecimientos de la provincia, a una semana del inicio de clases. Impulsada por el Ministerio de Educación nacional, y desarrollada en Santa Fe con el apoyo del presidente de la bancada kirchnerista en Diputados, Agustín Rossi, la iniciativa convocó a jóvenes, niños, padres y directivos de las instituciones. Rossi señaló que la actividad desarrollada "muestra un Estado presente", lo que "fundamenta el proyecto nacional y popular, que comenzó en 2003 de la mano de Néstor Kirchner". Por su parte, Leandro Bosatto, uno de los jóvenes que participó de la iniciativa, aseguró a Rosario/12 que lo más importante de este aporte "fue ver a los jóvenes como nexo de recomposición del sistema de valores de la sociedad argentina".

"Este programa logró una hermosa conjunción de la comunidad educativa, los vecinos y los jóvenes que se unen para participar de esta actividad a lo largo del país", dijo el precandidato a gobernador por el PJ, mientras pintaba un mural en la escuela Río Paraná de Rosario.

Para los voluntarios de la iniciativa, la experiencia fue "muy buena", y en ese sentido aseguraron: "Nos ayudó a confirmar el proceso histórico de movilización juvenil que está teniendo la realidad argentina, con una fuerte impronta de espontaneidad y voluntarismo. Hubo un fuerte involucramiento de la comunidad en general y vemos que estos trabajos confirman lo que venimos afirmando: que es un cambio para bien respecto al compromiso". "Pasamos de una sociedad de los `90 con un fuerte individualismo, a una en la que se regenera el tejido social en base a la solidaridad", dijo Bosatto sobre lo más destacable de las jornadas que finalizaron anteayer.

El programa, que se desarrolló en varias provincias del país y que convocó a más de 20 mil jóvenes argentinos, tenía como objetivo tres puntos principales. Uno de ellos fue "colaborar con las escuelas, para que los chicos puedan empezar las clases y tener mejores condiciones edilicias que con las que terminaron el año pasado", señaló Bosatto. En tanto, el punto fundamental fue "buscar la apropiación, retomar el espacio público a través de los valores que generan los jóvenes, para con la comunidad". Como tercer arista se apuntó a "recrear los lazos que unen el espacio público de la escuela con la comunidad".

Con esa impronta, las tareas fueron abiertas a la comunidad, y se hicieron actividades culturales para que se involucraran los vecinos. Así, el proyecto atrajo a directivos de las escuelas, alumnos y el propio barrio donde se hacía la intervención, que demandó alrededor de 13 mil pesos por cada escuela, y una semana de trabajo voluntario.

Bosatto destacó la decisión del gobierno nacional de mejorar la infraestructura de las escuelas para el inicio del ciclo lectivo 2011, que comienza el próximo lunes. Y aseguró que para estas actividades, y otras similares que los convoca, "los jóvenes rediseñaron la escala de valores de la sociedad".