Desde Santa Fe

Finalizaron ayer los alegatos en el juicio al ex comisario Roberto Martínez Dorr, acusado por "la privación ilegal de la libertad agravada" y "tormentos agravados" al ex militante de la UES, Froilán Aguirre, cuando tenía 17 años, en setiembre de 1976. La defensa pidió la absolución del policía y si hay una sentencia condenatoria, que la cumpla como hasta ahora, en su casa, con arresto domiciliario. La semana pasada, el fiscal Martín Suárez Faisal había solicitado 15 años de cárcel para Martínez Dorr, mientras que la querella pidió la escala máxima para ambos delitos: 20 años y que se revoque la prisión domiciliaria. Hoy, a las 10, seguirán las réplicas y contrarréplicas y luego el Tribunal anunciará el día del veredicto, si será mañana o la primera semana de abril. Ayer, dirigentes kirchneristas ya se anticiparon a pedir la expulsión de Martínez Dorr del PJ, como ya sucedió con otros dos condenados por crímenes de lesa humanidad: el ex presidente comunal de San José del Rincón, Mario José Facino y Eduardo Ramos, que también supo ser candidato a concejal por el justicialismo y a diputado nacional por el partido de Domingo Cavallo.

La cancelación de la ficha partidaria de Martínez Dorr fue solicitada por dirigentes de la Corriente Nacional de la Militancia, entre ellos el vicepresidente del PJ, Jorge Fernández -quien impulsó la expulsión de Facino y Ramos﷓, el diputado Leandro Busatto; el jefe de la Regional Litoral de la ANSES, Martín Gainza; el jefe UDAI Santa Fe, Humberto Galarza; el secretario general de la Junta Departamental del PJ, Gerardo Crespi y militantes del Movimiento Evita, las agrupaciones Néstor Kirchner, Paco Urondo, Arturo Jauretche, Compromiso Peronista, Fogoneros, Jóvenes para la Victoria y Mesas de Trabajo.

El petitorio recuerda el precedente de Facino y Ramos, cuando "el Tribunal de Disciplina partidario solicitó la expulsión de ambos represores durante los años del terrorismo de estado, cuestión que fue decidida por el consejo ejecutivo y refrendada luego por el congreso provincial", señaló.

"El Partido Justicialista es una institución profundamente democrática y participativa, con un fuerte contenido republicano, poniéndonos en una situación ética inclaudicable que nos obliga a solicitar la expulsión de semejante personaje. Y a la vez, nos obliga a realizar una pormenorizada autocritica por haber albergado a este siniestro personaje en el seno de nuestro partido", concluye la nota.