(Desde Santa Fe)

El gobernador Antonio Bonfatti habilitó ayer para ser tratado en extraordinarias un proyecto de ley del senador de la UCR, Hugo Rasetto, que propone crear un nuevo impuesto a los combustibles bajo la figura de una "tasa vial" destinada a financiar obras de infraestructura, similar a la que impuso en Córdoba el gobernador José Manuel de la Sota. El subsecretario de Ingresos Públicos, Sergio Beccari, confirmó que el tributo arrancaría con 32 centavos por litro de naftas o gasoil o metro cúbico de gas natural comprimido y estimó la recaudación en unos 700 millones de pesos anuales. El 70 por ciento ingresaría a las arcas de la provincia y el 30 por ciento sería coparticipado con municipios y comunas, que en algunos casos, como Santa Fe ya cobran una tasa vial a la radicación de vehículos en la ciudad.

El proyecto Rasetto ingresó por el Senado y ya levantó una oleada de críticas. "Una idea descabellada, una barbaridad", la calificó el presidente de la Federación Argentina de Expendedores de Naftas del Interior (Faeni), Marcelo Rovasio, y subrayó que va a contramano de la política nacional de combustibles. Mientras que su colega de la Cámara de Estaciones de Servicios, Garajes y Afines de Rosario (Cesgar), Marcelo Herrero, advirtió que los combustibles ya tienen una carga impositiva del 70 por ciento, sin contar el nuevo gravamen. El presidente de la Federación Argentina de Transporte de Cargas (Fatac), Vicente Bouvier, lo atribuyó a la "voracidad fiscal" de la provincia.

En la Legislatura, la primera reacción fue idéntica. El diputado del PJ, Mario Lacava, presidente de la comisión de Obras Públicas, dijo que "se trata de un nuevo impuesto injustificado y abusivo". "La provincia tiene un presupuesto aprobado de 53 mil millones de pesos. Más de 5 mil millones están destinados a obras y equipamientos y es de esos recursos de donde deberían salir los necesarios para reparar las rutas", agregó. Lacava advirtió también que la "tasa vial" es de "dudosa constitucionalidad", al punto que la de Córdoba ya fue cuestionada ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación que dictará su fallo en breve.

Los diputados Alejandra Vucasovich, Federico Angelini y Germán Mastrocola (Unión Pro) dijeron que el gobierno de Bonfatti intenta ahora resolver su "inoperancia con más impuestos". "Abonar 32 centavos por cada litro o metro cúbico de combustible no es una política de gestión, sino sólo un viejo recurso de la decadente gestión socialista. Si es posible el cobro de esta nueva tasa, debemos señalar que se sumaría al existente impuesto nacional que tienen los combustibles y que también están destinados para el mejoramiento de las rutas", plantearon.

Beccari defendió el proyecto y estimó la recaudación en 700 millones anuales. "Qué podrían hacer con esa plata?", le preguntó una colega de El Litoral. "De los 4.500 kilómetros que tiene la red vial de la provincia, hay 1.000 kilómetros que están en muy mal estado. Con estos 700 millones anuales podríamos hacer unos 300 kilómetros por año de repavimentación. Entonces, en tres años y medio, esos mil kilómetros estarían reparados", pronosticó.

El presidente de Faeni, Marcelo Rovasio comparó la "tasa vial" que pretende aplicar Santa Fe con la que ya se cobra en Córdoba, donde "causó mucho daño". "El proyecto del gobierno de Santa Fe va a contramano del gobierno nacional, que viene pactando con las petroleras un aumento cuidado de los combustibles en el mercado interno para morigerar el impacto en los consumidores finales, y ahora la provincia impulsa una suba de 32 centavos por litro, es una barbaridad", sostuvo.

Rovasio dijo que si la Legislatura sanciona la ley generará "un perjuicio y un enfriamiento de la economía santafesina, una retracción en el mercado". Y agregó: "Esperemos que prime el sentido común y que esto no prospere. Cuando se aplicó esta tasa vial en Córdoba provocó una retracción en el mercado por una notable baja en las ventas en las estaciones de servicio".