Mientras los trabajadores no médicos de los hospitales provinciales de Rosario decidieron ayer levantar el paro tras cobrar las sumas adeudadas, los integrantes de la Asamblea de Profesionales de la Salud Pública municipal iniciaron ayer, según evaluaron, "con altísimo acatamiento" la huelga de 48 horas en reclamo de mejoras salariales y laborales. El personal no médico nucleado en UPCN levantó la medida de fuerza a media tarde después de dos semanas de lucha. De todas formas, desde la cúpula gremial reiteraron el pedido al gobierno provincial de incrementar las partidas presupuestarias para los efectores que funcionan en la ciudad. En ese sentido la ministra de Salud de Santa Fe, Silvia Simoncini desmintió que falten insumos en los hospitales. En tanto, los médicos municipales continuarán hoy de paro, sólo manteniendo guardias mínimas.

Por la mañana la administración provincial comenzó a efectivizar el pago de las sumas adeudadas al 98 por ciento de los empleados. "Estuvimos evaluando si se cumplían los pagos y al ver que todo se dio con normalidad tal como lo prometieron decimos levantar la medida de fuerza ya que no podemos seguir dejando sin atención en salud a la ciudad", expresó el delegado gremial de UPCN, Juan Segueta.

El dirigente sindical aseguró que a los trabajadores se les abonó la totalidad de los sueldos adeudados, aunque quedaban aún algunos casos particulares que, estimó, se resolverán en los próximos días.

Más allá del pago a los trabajadores, los referentes gremiales volvieron a reclamarle ayer al gobierno provincial que incremente las partidas para los hospitales que funcionan en la ciudad. Aseguraron que por escacez de fondos faltan insumos básicos en los efectores.

Al respecto, la ministra de Salud, Silvia Simoncini negó rotundamente esa posibilidad en declaraciones a Radio Dos. "Es absolutamente mentira que falten gasas o recipientes para donar sangre. En ningún hospital provincial faltan insumos", aseveró la funcionaria.

Mientras tanto, en Rosario, los integrantes de la Asamblea de Profesionales de la Salud Pública municipal cumplieron ayer la primera de las dos jornadas de lucha en reclamo de mejoras salariales y laborales. "El paro tuvo altísimo acatamiento en todos los hospitales y en la mayoría de los centros de salud", evaluó Lucía de Vincenti, delegada de los médicos municipales. La profesional destacó la elevada adhesión que tuvo la huelga "pese a las amenazas de descontar los días no trabajados que hizo el intendente. Lejos de amedrentarnos, esas amenazas no hacen otra cosa que convencernos aún más de la justicia de nuestro planteo".

De Vincenti adelantó que durante la asamblea de esta mañana, frente a la muncipalidad, el sector analizará la continuidad del plan de lucha. "Vamos a evaluar medidas alternativas porque tenemos voluntad de servicio", dijo.