Los tacheros rosarinos volvieron a movilizarse ayer por el centro de la ciudad para reclamar la aprobación "urgente" del aumento tarifario y para oponerse a la inmediata incorporación de 500 nuevas chapas. Desde una de las cámaras del sector, Mario Cesca (Atti) denunció que las bancadas mayoritarias en el Concejo "está extorsionando a los propietarios de licencias, condicionando el incremento al supuesto blanqueo de los peones, cuando en realidad pretenden que sigamos aportando para una caja de 130 mil pesos mensuales que maneja el Sindicato". El titular del gremio de los choferes, Horacio Boix, sostuvo que "sólo un 40 por ciento" de los más de tres mil peones está debidamente registrado, el resto "un 30 por ciento está en negro y el resto está en condiciones precarias, sin cobertura social". El dirigente denunció que los dueños de los autos "quieren borrar con el codo lo que firmaron con la mano" y defendió la labor de los ediles "por intentar defender los derechos de los más débiles". Los titulares de licencia estudian reclamar la mediación del Colegio de Abogados.

La protesta de ayer generó un verdadero caos vehicular en el centro de Rosario. Los propietarios de licencias se concentraron en Rivadavia y Oroño y desde allí se movilizaron hacia la municipalidad y al Concejo. Allí reiteraron su reclamo: urgente tratamiento en el Palacio Vasallo del estudio de costos de la Universidad (que sugiere aumentar el cuadro tarifario un 25 por ciento) y suspender la autorización para que 500 nuevas chapas en breve circulen por las calles de la ciudad.

"Estamos cansados, hace varias semanas ya que los concejales nos vienen prometiendo tratar en comisión el mensaje del Ejecutivo y siempre encuentran una excusa para no hacerlo. Mientras tanto aumentó el boleto del transporte y nuestra tarifa sigue atrasada", dijo Cesca.

Los tacheros prometieron volver a concentrarse pasado mañana cuando se reuna la comisión de Servicios Públicos. "Si el lunes no tratan el proyecto del municipio, que propone una suba tarifaria menor a la que corresponde (Atti reclama una bajada de bandera de 2,60 en lugar de los 2,20 sugerido por la UNR), vamos a evaluar qué medidas adoptar", adelantó el máximo refrente de la Asociación de Titulares de Taxis Independientes.

Entre las alternativas que manejan las cámaras se encuentra además del lockout patronal, solicitar una mediación al Colegio de Abogados de Rosario, similar a la que pretendió impulsar el gremio docente.

Cesca admitió que son pocas las chances de que el mensaje de la intendencia sea debatido el próximo jueves en el recinto a raíz de la advertencia que hizo la principal bancada opositora: el justicialismo aclaró que no votará el aumento tarifario si antes no se efectiviza el blanqueo laboral de todos los choferes.

"Nos están extorsionando, dicen que no van a tratar el aumento de la tarifa hasta tanto no estén blanqueados los peones. En realidad quieren que firmemos un convenio a través del cual el Sindicato se asegura el 4 por ciento del sueldo para un fondo solidario que termina siendo una caja. Es un problema de caja, no de mejoras laborales", planteó Cesca quien llamó a los peones a trabajar "en conjunto, para mejorar el sistema".

Consultado por Rosario/12, Boix refutó las afirmaciones del titular de Atti. "El convenio al que alude, Cesca ya lo firmó, quien paerce querer borar con el codo lo que firmó con la mano. Ese fondo lo tiene todos los gremios, lo que no quieren los propietarios de licencias es discutir el monto de los salarios de los choferes en la estructura de costos. Por lo demás, está bien que el Concejo intente legislar para los más débiles. Sólo quieren aumento de tarifa y no dicen nada de los choferes", indicó.