SANTA FE
"Fue una declaración muy sólida", dijo un vocero judicial, sorprendido por una pieza que puede tirar la cadena de responsabilidades.
› Por Juan Carlos Tizziani
El desfile de ex funcionarios de Carlos Reutemann en Tribunales por la catástrofe del río Salado detonó ayer otra sorpresa. El ex director de Hidráulica de la provincia, Ricardo Fratti -el único al que Lole despidió de su cargo cuando un tercio de la ciudad de Santa Fe estaba bajo agua y decenas de familias aún velaban a sus muertos declaró durante cuatro horas ante el juez de Instrucción, Diego de la Torre. La indagatoria más extensa, hasta ahora. Respondió más de 70 preguntas. Entregó documentos que amplían lo que dijo como testigo en la causa, el 5 de noviembre de 2003. Y protagonizó un hecho infrecuente en estos tiempos: aceptó ser indagado sin defensa técnica. De la Torre designó al defensor oficial, doctor Jorge Pegassano, para que lo asista pero éste no participó en la audiencia porque ni siquiera le avisaron, así que Fratti enfrentó las acusaciones sin abogado defensor. "Fue una declaración muy sólida", dijo un vocero del Palacio de Justicia, aún sorprendido por una pieza que puede tirar la cadena de responsabilidades. Ya hace dos años, Fratti complicó a Reutemann, cuando dijo que el 29 de abril de 2003 informó personalmente al ex gobernador cuál era la situación en Santa Fe ante el avance indetenible del río.
Fratti apeló también al efecto sorpresa para evitar un encontronazo con las víctimas de la catástrofe que se plantan cada tarde frente al Palacio de Tribunales en demanda de juicio y castigo a los culpables. A las 13, se presentó en el despacho del juez para enfrentar las acusaciones que le imputó el fiscal Ricardo Favaretto. "Haber omitido sus deberes de funcionarios públicos atento a los hechos que se produjeron en Santa Fe y de los que tenía conocimiento antes de la inundación de la ciudad. No tomar las medidas pertinentes para minimizar los perjuicios. Y provocar con esa inacción cuantiosos daños a las propiedades y la muerte de 23 personas".
La Oficina de Prensa del Prensa del Poder Judicial difundió una esquela de diez líneas para informar sobre la indagatoria de Fratti, en la causa que investiga posibles responsabilidades penales de funcionarios públicos por la catástrofe del Salado. "La audiencia comenzó alrededor de las 13 y se prolongó hasta las 17. El imputado no asistió acompañado por un abogado de confianza, por lo cual el juez le asignó un defensor general (el doctor Pegassano). A lo largo del interrogatorio respondió a más de 70 preguntas y acompañó un informe escrito", agregó. Lo curioso es que Pegassano se enteró por la prensa que tenía que defender a Fratti, no asistió a la audiencia porque ni siquiera le avisaron.
Fratti fue el único funcionario al Reutemann despidió de su gobierno después de la catástrofe. Lo echó con un decreto de tono acusatorio el 5 de mayo de 2003. "Visto las gravísimas consecuencias originadas por el desastre hidrológico sufrido por la ciudad de Santa Fe y su zona de influencia resulta imprescindible establecer responsabilidades", decía el decreto 975 que removió a Fratti.
El 5 de noviembre de 2003, Fratti declaró ante el juez De la Torre como testigo, a quien entregó pruebas que a su criterio lo exculpan, entre ellas el plano de Santa Fe, donde marcó con una línea roja los barrios del oeste que se iban a inundar y que exhibió en la Casa Gris ante Reutemann y sus ministros. Allí estaban también el ex intendente Marcelo Alvarez y sus secretarios. "Indiqué con una línea roja la cota 1680 y aclaré que desde ahí, hacia el oeste se iba a inundar toda la ciudad. En la reunión en la Casa de Gobierno estaban presentes el gobernador (Reutemann) y todos los ministros", apuntó.
-¿Usted dio avisos? -le preguntó entonces el juez.
-Sí, yo dí varios avisos -contestó Fratti. Y los mencionó: "El lunes (28 de abril) por la emisora LT10 dije que se acercaba el pico de una crecida y como habían colapsado los terraplenes al norte de Gorostiaga habría miles de evacuados. Informé al Comité de Emergencia Hídrica que si no se cerraba la brecha del terraplén iba a haber aproximadamente 80.000 afectados. El 29, hablé con el intendente que estaba en LT 10, donde escuché que decía que no se iban a inundar los barrios del sur y le dije que esto era un hecho grave. A las 10 de la mañana, informo al ministro Berli. Y a las 11.30, al gobernador y a su gabinete".
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