Más de dos horas, matizadas ellas con algunos añadidos gastronómicos, necesitó en la noche del lunes Eduardo López para serenar a Ricardo Caruso Lombardi, inquieto por la falta de jugadores y la ausencia de refuerzos. El reencuentro entre presidente y entrenador arrojó como mayor certeza el inminente regreso a las negociaciones con las autoridades de River para concretar la cesión de Santiago Salcedo, lo que redundaría en el arribo de futbolistas producto de los billetes que ingresarían por el guaraní. El cónclave nocturno, además, dejó al técnico expectante en la posible llegada de Hugo Barrientos y abrió puertas sobre una nueva lista de jugadores que le interesan el conductor del plantel superior. "Estamos complicados", diagnosticó Lombardi.

La concentración que inició el lunes el plantel en Ricardone se vio alterada en su primera noche de descanso, cuando López convocó al técnico al hotel de Dorrego y Urquiza que acostumbra frecuentar el mandamás del parque Independencia. Por más de 120 minutos, López y Lombardi cruzaron opiniones sobre el frágil presente del plantel superior. López aceptó las demandas de Lombardi, y el entrenador bajó la cabeza al conocer el degradado escenario financiero que soporta la institución.

El resultado del diálogo tuvo como reacción inmediata el descenso de la ansiedad del entrenador, que ya no duda en despejar dudas sobre su continuidad. Claro que, ahora sí, en los próximos días deberán llegar los refuerzos. Y el disparador de esas gestiones será la concreción de la venta de Santiago Salcedo, por quien esta tarde López volverá a conversar con José María Aguilar, presidente de River, en Buenos Aires. En simultáneo, el representante del goleador, Pedro Aldave, acerca videos del jugador en clubes de España, donde el intermediario está ultimando la documentación concerniente a la llegada de Justo Villar al Valladolid.

Los ex Oimpos, Pablo Monsalvo y Gustavo Pinto cumplieron ayer la primera jornada de entrenamientos en doble turno, que tuvo a los jugadores rojinegros utilizando el espacio verde de la zona de facultades emplazada en Beruti y Riobamba. Ninguno de los dos conoce aún si la entidad les ofrecerá contrato, pero ambos reconocieron que para eso se debe esperar que "Ñuls venda a (Nicolás) Spolli o Salcedo". Y aunque no entrena con el equipo, en similar situación se encuentra Hugo Barrientos, quien tiene acordado de palabra su contrato con Ñuls, pero que para desvincularse de Huracán es imprescindible que los leprosos arriben a un acuerdo con los quemeros.

Los más urgentes compromisos económicos podrían afrontarse antes de lo esperado, si prospera el ofrecimiento que tiene Germán Ré por continuar su carrera en el fútbol mexicano. Ñuls pretende dos millones de dólares. Y con ese dinero se podría, por ejemplo, afrontar las negociaciones para traer a los nuevos jugadores apuntados por el entrenador, lista donde se destacan el delantero de Estudiantes Marcos Pirchio y el defensor de Quilmes Diego Sequeira. "Estamos complicados, esa es la verdad. Pero tenemos fe en que la situación se va a revertir", se esperanzó el entrenador leproso, quien luego acotó: "Si no viene nadie nos arreglaremos con lo que tenemos".

En lo institucional, la Inspección General de Personas Jurídicas (IGPJ), a cargo de Pablo Clement, dilata la resolución respecto al pedido de impugnación de la última asamblea que se realizó en el club, elevado por los miembros de la oposición. Ya pasaron dos meses de la cuestionada asamblea e IGPJ aún no se expidió al respecto.