1 Estudiantes LP: Andújar, Angeleri, Cellay, Desábato, Ré, Pérez, Sánchez, Verón, Benítez, Fernández y Boselli. DT: Alejandro Sabella.

0 Ñuls: Caffa, Spolli, Schiavi, Insaurralde, Pillud, Bernardi, Bernardello, Vangioni, Formica, Da Silva y Armani. DT. Roberto Sensini.

Gol: ST 3m Braña (E).

Cambios: PT 34m Iberbia por Angeleri (E). ST 21m Sperduti por Bernardi (Ñ), 24m Salcedo por Da Silva (Ñ), 31m Fernández por Benítez (E), 33m Quiroga por Vangioni (Ñ) y 36m Calderón por Boselli (E).

Arbitro: Néstor Pittana.

Cancha: Estadio Ciudad de La Plata.

Ñuls sigue sin encontrar el rumbo. Perdió el tercer partido en el campeonato y acumula nueve fechas sin conocer la victoria. Ayer, en La Plata, no tuvo un buen encuentro y cayó derrotado por 1 a 0 con gol de Braña, con la colaboración del arquero Caffa que no pudo controlar un tiro livianito. El equipo de Sensini no tuvo ideas para generar ocasiones de gol en todo el partido y no encontró en Formica un enganche que se encargara de hacer participar a los delanteros en el juego colectivo. El conjunto rojinegro se vio superado en algunos momentos del encuentro, aunque pagó muy cara su derrota por un error de su arquero en la segunda parte, que no consiguió superar en el resto del encuentro. Era un partido de gol gana y el tanto lo convirtió Estudiantes. Ñuls no se pudo sobreponer al golpe y si bien en los últimos minutos buscó la igualdad no tuvo argumentos sólidos para conseguirla. Esta vez Ñuls no jugó bien, dejó una pálida imagen y sigue generando dudas en su funcionamiento colectivo.

En la primera parte no se vieron momentos de buen fútbol. Ninguno de los dos equipos pudo plasmar en el campo de juego las buenas intenciones que se desprendían de los planteos propuestos por ambos técnicos. Ñuls apostó a Formica para que se haga cargo de la creación, pero el juvenil volante no pudo ponerse el equipo al hombro y por eso Armani quedó en soledad en el área visitante. Por su parte, el paraguayo Da Silva bajaba unos metros para tomar contacto con el balón y poder asociarse con Formica en la construcción de jugadas ofensivas y desde ese lugar pudo en algunos lapsos, ganarle a los defensores rivales. En el medio, Bernardello y Bernardi robaban muchas pelotas aunque cuando la tenían en sus pies tampoco le daban un buen trato al balón. Sólo algunos avances de Pillud por la derecha inquietaban a la defensa pincharrata y ese fue el único argumento que tuvo Ñuls en la primera etapa.

Las ocasiones de gol estuvieron ausentes. Del lado de los rojinegros, se pudieron contabilizar algunos remates de Vangioni y Formica y un intento de Schiavi, luego de un tiro de esquina que no pudo conectar de lleno. Casi nada en 45 minutos.

Por su parte, el conjunto de Sabella, le dio un mejor trato al balón. Con Verón en el medio comandando todos los ataques y triangulando con Enzo Pérez y Angeleri le generaban algunas complicaciones a la defensa leprosa, principalmente por su lado izquierdo. Arriba, ocurría lo mismo que con los delanteros rojinegros. Boselli se mostraba desconectado y la Gata Fernández, por momentos, se las ingeniaba para hacer alguna jugada para el aplauso pero luego sus ataques se desvanecían.

Los locales se acercaron al arco de Caffa con algunos tiros de Pérez y Benítez que salieron desviados.

El complemento arrancó más entretenido. A los dos minutos, le anularon un gol a Boselli por posición adelantada y sesenta segundos después Estudiantes se puso en ventaja. Braña tomó la pelota fuera del área, remató al medio del arco y Caffa, se complicó solo y el balón se le escurrió entre los dedos. El local se ponía arriba sin haber hecho mucho. Luego de la apertura del marcador el partido volvió a entrar en un ritmo lento y trabado. Ñuls, seguía sin tener el balón. Formica no aparecía y los delanteros eran dos figuras decorativas. La primera llegada de Ñuls en la segunda parte fue un tiro de Bernardi que se fue desviado. Los volantes no podían controlar la pelota y en la defensa aparecían algunos desacoples. Sensini intentó con los ingresos de Sperdutti y Salcedo (por Bernardi y Da Silva, respectivamente), pero ninguno de los dos le pudo dar claridad a los ataques rojinegros. Estudiantes seguía teniendo el control de la pelota desde los pies de Verón, Braña y Pérez y con ese argumento le bastaba para justificar la victoria.