"Para traer un técnico no vamos a hipotecar el club. Al menos yo no voy a firmar un contrato parecido al que nos pidió (Miguel) Russo", resaltó el tesorero de Central Hugo Ruggiero. La misma postura defiende Horacio Usandizaga, quien dirige al club desde su domicilio particular, al no haber firmado nunca su licencia. Los colaboradores de Edgardo Bauza anticiparon ayer la vuelta del Patón a la dirección técnica del primer equipo canaya, aunque aún resta por zanjarse los números de su vínculo: "Central puede pagar un contrato que reconozca objetivos cumplidos. Es la única forma que tenemos para contratar a Bauza", recalcó el responsable de las cuentas auriazules.

El regreso de Bauza fue anticipado por sus colaboradores, José Di Leo y Alejandro Mur, incluso sugerido por el vicepresidente Daniel Viliguer. El proyecto deportivo tiene nombres de refuerzos, como el Luciano Figueroa por ejemplo, pero entre el Patón y los dirigentes aún no se habló de números. Y si el entrenador exige como pretensiones

económicas aquellas pedidas semestre atrás, cuando lo fue a buscar al Vasco, entonces su vuelta deberá esperar.

Porque para contratar al sucesor de Russo se necesita la firma de Usandizaga, debido a que su licencia no tiene registro administrativo, por tal en lo formal el Vasco sigue ejerciendo la presidencia. Y Usandizaga se encolumna detrás de la máximas de Ruggiero: "Lo que no le dimos a Russo tampoco se lo podemos dar a Bauza. Yo estoy dispuesto a tomar deuda razonable, que se puede pagar en un año. Central sí le puede ofrecer al Patón un contrato importante por objetivos cumplidos", aclaró el tesorero auriazul.

Como los colaboradores de Bauza ya dieron declaraciones de lo que será el nuevo trabajo a desarrollar en el club, los dirigentes descuentan que el Patón será flexible en la negociación económica. En cuanto al resto, ya hay empresarios de la región que ofrecen comprar el pase de Figueroa para cederlo un año a Central, y alentadoras son las perspectivas para dar con la renovación de los vínculos de Ezequiel González y Cristian González. Incluso, si es del gusto del técnico, hay grandes chances por lograr un nuevo préstamo de Matías Escobar. No así el de Iván Moreno y Fabianesi, quien para su continuidad Central debe pagarle a Estudiantes, dueño de su pase, medio millón de dólares.

En las próximas horas los dirigentes auriazules deberán abocarse a estos menesteres del fútbol profesional, por ahora desatendidos por la ausencia de un cuerpo técnico. Aunque hoy será un día decisivo para conocer el futuro del Vasco en el club, quien amenazó con renunciar dentro de un mes, decisión que podría rever si esta noche recibe un respaldo masivo de los hinchas, en concentración de apoyo a su gestión convocada para las 19 en Entre Ríos y Salta, lugar de su domicilio particular.