Horacio Usandizaga presentó el lunes pasado en el juzgado que entiende en el concurso de Central un meticuloso informe contable donde reconstruye la administración financiera cuando estuvo al frente de la institución. El ex presidente elevó pruebas en la Justicia como respuesta al balance que presentará el actual gobierno de Norberto Speciale en la asamblea de mañana. El Vasco asegura que la deuda por juicios, en el peor de los casos, la dejó el 25 de mayo de 2010 en $ 29.305.218, en AFA un rojo menor a los 10 millones de pesos, y sueldos y primas al día. De esta manera desestimó los números del balance que estarán mañana a consideración de los socios y que arroja un pasivo de $ 85.665.198.

El ex representante de jugadores de las inferiores de Central, Juan Carlos Silvetti, intimó al club por 19.500.000 pesos, en concepto de "daños y perjuicios", como consecuencia de la decisión de Usandizaga de prohibir su permanencia como representante de futbolistas de las inferiores auriazules. Pero el balance realizado por la actual dirigencia incluye como deuda lo reclamado por Silvetti, a pesar de que no existe demanda alguna del ex representante, sino solo un reclamo extrajudicial.

Al respecto, Usandizaga, en el informe presentado a la jueza Liliana Giorgetti, recuerda: "El actual presidente era uno de los encargados del fútbol profesional y vocal del club cuando se tomó por unanimidad la decisión de que los jugadores del club no sean representados por Silvetti". Y añade: "No logramos comprender por qué se ha previsionado este reclamo absolutamente inverosímil, no habiendo posibilidad de que el club sea condenado".

Al asumir en Arroyito a fines de 2007, Usandizaga asegura que tomó la entidad "con más de 400 juicios, los cuales alcanzaban una cifra aproximada de $ 80.000.000, actualmente quedan alrededor de 53 juicios en los que pueda ser condenado Central como máximo; perdiendo todos los juicios y en varios años, sería por $ 22.000.000".

Lo más curioso del informe se encuentra en la carilla 21, donde se detallan juicios hederados de la gestión de Pablo Scarabino y saldados, "donde se destaca la deuda con el señor Soler (sucesor de José Aurelio Pascuttini cuando renunció a la coordinación de las inferiores por amenazas), encargado de las divisiones en la última etapa de la gestión Scarabino. Se planteó su participación en el manejo que tenía sobre las mismas los señores Silvetti y Andrés "Pillín" Bracamonte". Es la primera ocasión que se reconoce por escrito el protagonismo que el líder de la barrabrava canaya --ayer recuperó su libertad tras ocho meses de prisión-- tuvo en las canchas de Granadero Baigorria donde entrenan las divisiones menores.

"Desde el año 2003 hasta el 2007 se pagaron por honorarios de abogados más de $ 4.500.000. En contraposición, el departamento legal durante la gestión de Usandizaga --donde se desempeñaba su hijo Manuel-- generó una erogación cercana a los $ 800.000 entre noviembre de 2007 y mayo de 2010", resalta el informe firmado por el Vasco, su hijo y el abogado Pablo Barello.

Por último, el Vasco acota que "resulta innegable que la gestión de Scarabino constituye la etapa más bochornosa de la historia del club". En la oportunidad Usandizaga omite referencia alguna a última gestión de Víctor Vesco, a la cual se le detectaron irregularidades aún más graves en 15 pericias, pero al conocerse el resultado de las pesquisas la causa fue archivada por la Justicia.