Desde la segunda fecha del Clausura que Ñuls no entrenaba con la paz que provoca conseguir una victoria. Aquel lejano triunfo ante Lanús por 2 a 1 en el Coloso fue la última celebración del plantel por entonces comandado por Roberto Sensini. Ese partido se disputó el 19 de febrero y debieron transcurrir más de dos meses para volver a festejar.

En un clima más distendido, los jugadores leprosos practicaron el sábado de cara al próximo encuentro ante Godoy Cruz de Mendoza. Al igual que la última fecha, tendrá una semana corta de trabajo porque el encuentro se jugará el viernes a las 20.10 en el Estadio Marcelo Bielsa. El entrenador Javier Torrente analiza realizar modificaciones. El venezolano Cichero podría salir del once inicial.

El equipo mostró otra cara ante el lobo platense. Con vocación claramente ofensiva, los de Torrente generaron varias situaciones de gol y complicaron más de la cuenta a un rival débil, que exhibió graves falencias en la última línea.

Ñuls las aprovechó, respiró y celebró con puños apretados. De cara al choque ante el tomba, es de esperar que Torrente decida el ingreso de Leonel Vangioni (foto), quién jugó todo el segundo tiempo ante Gimnasia y volvió en aceptable nivel tras la serie de lesiones que lo alejaron de las canchas. Si bien no hay certezas de quién saldrá del equipo, es muy probable que sea Cichero, a raíz de una seguidilla de malos rendimientos que lo convirtieron en uno de los jugadores más criticados por los hinchas rojinegros. Si se confirma la modificación prevista por Torrente, Vangioni jugaría de lateral por la izquierda y el paraguayo Estigarribia mantendría su puesto de volante.