Después de un año de conversaciones entre oficialismo y agrupaciones opositoras para reformar el estatuto de Central, la dirigencia de Norberto Speciale aplazó cualquier acuerdo y pegó el portazo, eliminando del orden del día de la próxima asamblea el resultado del extenso debate. Siete movimientos políticos del club calificaron de "extemporáneo" las exigencias a las autoridades, al tiempo que Speciale aseveró que "no podía esperar más por un acuerdo". "Teníamos la promesa de (Julio) Colabianchi (vicepresidente) de que la Comisión Directiva iba a llamar a asamblea para reformar el estatuto", lamentó Francisco Broglia, representante del Crece en la Comisión de Reforma del Estatuto. En una reunión en Fiscalía de Estado, con la presencia del flamante Inspector General de Personas Jurídicas, Ricardo Silverstein, Speciale apoyó sobre la mesa la reforma del estatuto propuesta por la dirigencia, que desestimaba todos los acuerdos, haciendo aún menos amigable al socio las reglas estatutarias para participar en política y tener acceso a la información del club. "Junto a las agrupaciones participantes apostamos a que la Comisión Directiva trate la reforma del estatuto en asamblea, algo que nos había prometido Colabianchi cuando nos convocaron. Las conversaciones comenzaron en un momento de crisis, con el club en el Nacional B y perdiendo. Cuando el equipo empezó a ganar y llegó el ascenso aparecieron las primeras trabas del oficialismo, y más aún luego de que se le ganó a Newell's", precisó Broglia.

La Comisión de Reforma de Estatuto estuvo integrada por Renovación Canalla, Central Gigante, 1889, Marcca, Crece, Refundar Central y Socios Independientes. "En la primera reunión --recordó Broglia-- Colabianchi nos prometió el oro y el moro y hasta nos aseguró que la dirigencia no iba a tener capacidad de veto a lo acordado. Era un momento delicado de la dirigencia. Pero a medida que el equipo empezó a ganar todo eso cambió".

La asamblea donde los socios aspiraban a debatir un nuevo estatuto tenía como fecha límite de realización el 28 de octubre. Es decir, que la dirigencia realizará la asamblea anual con plazos vencidos, situación que le hicieron saber a Silverstein los representantes de la agrupaciones opositoras en la última reunión entre las partes.

"Ninguno de los anteproyectos elaborados han reunido el tan buscado consenso", explicó la dirigencia de Central, que solo se pronunció por medio de un comunicado oficial. "La reforma del estatuto se posterga para una asamblea extraordinaria a llevarse a cabo el año entrante", aseguró la dirigencia auriazul. Aunque para Broglia "esta oportunidad ya se perdió, la reforma del estatuto será un desafío para lista que se imponga en las elecciones del año que viene".