"El objetivo de estos dos años se cumplió, ahora hay que proponerse otro", confesó ayer Miguel Russo, quien espera por el regreso al país del presidente Norberto Speciale para negociar su renovación de contrato. En lo deportivo, Russo quiere para el próximo torneo refuerzos de jerarquía que permitan dar el salto de calidad para ir a la búsqueda de desafíos más ambiciosos.

"El proyecto deportivo tiene mucho que ver en mi continuidad, este es un club de obligaciones. Acá hay que hablar de planificación, el ejemplo está en Lanús y Vélez", puntualizó el entrenador canaya. "Hay cosas que nosotros no tenemos la culpa. El club estuvo tres años en otra categoría, no se puede construir todo de la noche a la mañana. Bastante bien estamos más allá del resultado negativo del fin de semana", ponderó Russo.

En lo que resta del Final, el equipo de Arroyito aún puede lograr la clasificación a la Copa Sudamericana. Para eso deberá vencer el sábado a Olimpo en el Gigante, partido en el cual el canaya no podrá recuperar a Sebastián Abreu, aún lesionado en su rodilla derecha, y está en duda el regreso de Rafael Delgado, tras una suspensión, por una dolencia muscular. Mañana Russo probará el once titular en práctica de fútbol, donde seguramente mostrará a Antonio Medina en el medio por el expulsado Hernán Encina.