Cuando el partido se moría y Central se retiraba conforme con la igualdad por haber mejorado la pálida imagen mostrada ante River, llegó lo impensado. En el tercer minuto de descuento, el arquero de Gimnasia cometió un penal y Delgado lo convirtió para conseguir los tres puntos. El canaya fue de menor a mayor, arrancó el juego con las mismas dudas exhibidas la semana pasada, pero se fue recuperando a partir del empate de Barrientos. En el epílogo se vio lo más destacable, los primeros trazos de un equipo que intenta jugar con precisión y buen toque. La victoria contribuirá a superar el cuadro.

Los tres cambios posicionales que introdujo Russo luego de la imagen sombría que Central mostró en el Monumental no incidieron en los primeros minutos del juego disputado en el Bosque platense. El canaya fue un calco de lo que jugó ante River, al punto de que a los 11 minutos ya se encontró abajo en el marcador con un gol del delantero Vegetti, Pero no solo eso, antes de la apertura del marcador, Gimnasia dilapidó dos chances muy claras para convertir. Primero, Caranta salvó espectacularmente un remate de Rojas y, luego, Vegetti cabeceó sin marca y la pelota se fue rozando el segundo palo.

Central es endeble en defensa y caótico en ataque. El lobo, con un libreto práctico, basado en una presión fuerte en mediocampo y salida rápida en la ofensiva lo complicó demasiado. Las aproximaciones al arco defendido por Monetti solo fueron acciones individuales, nada elaboradas, principalmente ejecutadas por los veloces Becker y Acuña. La poca movilidad de Abreu tampoco contribuye con el buen pie que tiene, a priori, la zona de volantes canaya, quienes repiten una y otra vez el pelotazo como vía para conectarse con el uruguayo. Experimentados en el juego aéreo, los dos centrales platenses resolvían con simpleza.

Gimnasia mantuvo la intensidad y Central se limitó a las individualidades. En una de esas, llegó al inmerecido empate. Acuña la peleó, Barrientos aprovechó el rebote y de primera clavó su primer gol con la camiseta auriazul. El canaya estaba para el cachetazo, pero una guapeza le puso tablas al partido. El lobo perdió por lesión a Vegetti y, misterios de este deporte apasionante, se le esfumó de los manos en unos segundos todo lo que había conseguido.

El partido no fue el mismo en el epílogo. Gimnasia perdió peso ofensivo por dos motivos. Lo castigó el esfuerzo de la primera etapa y perdió a su delantero, el finalizador de las jugadas. Central empardó y dispuso de más espacios. De a poco, se amigó con la pelota y comenzó a hacerla circular con precisión. Caranta le quitó el gol a Rojas y Monetti a Abreu. El partido era muy parejo y ambos se animaban al cuarto de hora. El canaya pudo sacar ventaja, pero Lunati incidió en el juego al no cobrar un claro penal tras agarrón de Barsottini a Niell.

Ahora sí, promediando el segundo tiempo, Central revertía la imagen del fin de semana pasado. Más firme en el campo, procuraba ser preciso en los pasos y acceder a campo contrario por las bandas, donde tiene jugadores rápidos. Sin embargo, no ingresaba al área con facilidad. Por ese motivo, el centro seguía siendo la alternativa de mayores dividendos. Por esa vía, Musto convirtió en héroe a Monetti, que salvó un cabezazo a escasos metros. Gimnasia se redujo a los intentos aéreos y casi lo gana a través de Barsottini. Pero ambos se fueron agotando y aceptando el empate. Hasta que llegó la jugada del penal, Monetti salió donde no debía y tumbó a Aguirre. Delgado cambió por gol y festejó junto a sus compañeros un triunfo vital.

1 Gimnasia: Monetti; Oreja, Barsottini, Benítez, Licht; Miloc; Rojas, Ignacio Fernández, Alvaro Fernández, Mendoza; Vegetti. DT: Pedro Troglio.

2 Central: Caranta; Ferrari, Donatti, Berra, Delgado; Becker, Musto, Barrientos; Niell, Abreu, Acuña. DT: Miguel Russo.

Goles: PT 11m Vegetti (G), 38m Barrientos (C), ST 49m Delgado de penal (C)

Cambios: PT 42m Cardozo por Vegetti (G), ST 21m Aguirre por Becker (C), 25m Bou por A. Fernández (G), 32m Valencia por Abreu (C), 34m Bonifacio por Rojas (G), 39m Medina por Niell (C)

Arbitro: Pablo Lunati

Cancha: Gimnasia y Esgrima