Donde haya barras, habrá policías. Eso dispuso el Ministerio de Seguridad de la provincia para este domingo ante el debut de Newell's ante su gente. Como telón de fondo en el arco del Coloso que da al hipódromo se impondrá el azul policía por sobre el rojo y negro de las banderas de la hinchada, decisión que fue rechazada por la Comisión Directiva del club, ampliando las diferencias con la funcionarios de la provincia respecto al conflicto con los violentos en el club. "Cuando empezó la reunión (ayer) la decisión ya estaba tomada, ni siquiera fuimos consultados, fue una determinación unilateral que no compartimos", lamentó el vicepresidente Cristian D'Amico.

"Vamos a darle un mensaje a los violentos", sintetizó Diego Maio, coordinador de Seguridad para Eventos Deportivos de la provincia. El funcionario anunció ayer que el domingo, en ocasión del partido entre Newell's y Tigre, el operativo de seguridad tendrá como particularidad la presencia de fuerzas policiales dentro de la tribuna que ocupa la barra, vedando el acceso a los tres paraavalanchas principales donde se ubican los referentes de la hinchada.

Es decir que los barras se distribuirán en toda la popular baja menos en el sector de exclusión que montará la policía, haciendo incluso más difícil la identificación de los violentos. Por lo pronto, la barra tiene acceso a las banderas y los bombos y recién hoy la hinchada definirá dónde desplegará las banderas y cómo se ubicará en la popular, ante la decisión dispuesta por el Ministerio de Seguridad.

Los asesores del ministro Maximiliano Pullaro evaluaron jugar el partido a puertas cerradas, luego consideraron clausurar la popular baja, como se hizo el pasado domingo, y finalmente se optó por cercar con vallas el sector característico de la barra, generando aún más incertidumbre sobre una hinchada que se encuentra en plena renovación con el regreso a las tribunas de referentes de la barra que lideró el fallecido Roberto "Pimpi" Camino.

"Son medidas antipáticas que nadie quiere tomar, pero lo creemos necesario convencidos de que el mensaje le tiene que llegar al barra", aseveró Maio. "La decisión fue tomada unilateralmente, estamos decepcionados porque las consecuencias las pagamos nosotros", lamentó D'Amico. Será la primera vez que fuerzas policiales ocupen la tribuna popular de Newell's en un partido del primer equipo.