Nacida en Casilda, radicada en Rosario y vinculada musicalmente a diversos proyectos relacionados con el folclore y el tango, Aldana Moriconi finalmente le dio forma a un disco propio. Editado a través de la Unión de Músicos Independientes, el material se conforma de once canciones en las que la cantante demuestra su versatilidad. Clásicos, inéditos, tangos, carnavalitos, chacareras y canciones conforman Vida y luz, que Moriconi presentará mañana, a las 22, en el Club Imperial de San Martín y el río.

Concretado luego de un año y medio de trabajo, incluye obras como "Chayita del vidalero" de Ramón Navarro, "Rumbo al cerro" de Mario Díaz y Alejandro Maldino, "Carnavalito del duende" de Cuchi Leguizamón, "Carinhoso" de Pixinguinha y Joao de Barro, "Fabelo" de Pablo Milanés, "La llave" de Abel Pintos y una serie de trabajos de autores locales. Ese listado da una primer pauta de la amplitud presente en la obra, aunque es la cantante la que aclara: "El hilo conductor del disco más que nada está dado por la parte musical, por los arreglos. Pero después también quería abarcar un poco de lo que ya había hecho anteriormente. Con Joel Tortul había tocado muchísimo tiempo y si bien `Nada` (de Dames y Sanguinetti) es un tango tradicional, el arreglo es totalmente contemporáneo. También tenía muchas ganas de realzar las obras de compositores de Rosario y de la región, algunas de las cuales ya habían sido grabadas en disco".

Entre esas últimas se encuentran "Pájaro en vuelo" de sus compañeros Canelo y Leale, "Chacareras desde aquí" de Federico Reschini, "Vida y luz" de Sergio Santi y "Dedal de mamá Felisa", obra inédita de Pepe Ferrer sobre textos de José Pedroni. A lo largo de ese repertorio, la cantante demuestra su solidez y versatilidad interpretativa. Una amplitud que Moriconi buscará sostener en su camino como solista. "Trato de no encasillarme en un género en particular, sino dejar que ocurra el enamoramiento por la obra --apunta--. Hasta ahora se fue dando así. Directamente escucho una obra y me enamoro, o me enamoro del compositor entonces la hago y punto, sin pensar demasiado. Por eso por ahí lo más importante es mantener ese hilo conductor a través de los arreglos musicales, y no tanto de los géneros. Realmente tengo ganas de hacer de todo. Trato de pensar más en la música, en mi amor por la música y en lo que me hace feliz y plena, porque me estoy desarrollando como intérprete".

Para su presentación en Club Imperial, Moriconi contará con la misma banda que la acompañó en la grabación del disco: Germán Lucero (bajo), Nahuel Canelo (guitarra), Verónica Debiazzi (saxo), Guillermo Leale (piano) y Rodrigo Casal (batería). A ellos se sumarán además algunos invitados especiales: "Con Joel Tortul vamos a tocar `Nada` los dos solos, vamos a seguir más o menos el lenguaje que venimos trayendo con él. En el caso de Víctor Parma vamos a hacer un tema de Alberto Cortés, `Como de costumbre`, con arreglos de Víctor. Lo vamos a hacer en formación de trío, con piano, batería y bajo. Estamos muy felices porque resultó una mezcla interesante. Y también algo diferente, porque Víctor se caracteriza por su quinteto de tango, pero es un músico que ha tocado de todo, es muy abierto. En el caso de Valdi Mónaco, una leyenda, él se acopla a nosotros para hacer el tema `La llave` de Abel Pintos y uno de Laura Ros que no está grabado en el disco. La siguiente invitada va a ser Casiana Torres, una cantante de Buenos Aires, que aceptó la invitación y viene exclusivamente a hacer conmigo `Beatriz Durante` de Carlos Aguirre".

La aparición de algunos temas que no forman parte de Vida y luz deja en claro que Moriconi sostiene una mirada amplia al momento de seleccionar su repertorio (e invitados). Algo que terminará redondeando un segundo disco, sobre el cual la cantante ya ha comenzado a trabajar.