A lo largo de la charla con Sebastián Cebreiro, segunda voz y fundamental arengador de La Vela Puerca, hay una sensación que sobresale de sus palabras: la de humilde agradecimiento a una realidad que la muestra como una de las agrupaciones más importantes del sur americano. Nacida y crecida en Uruguay, y consolidada en Argentina a fuerza de canciones sobresalientes, la banda que junto a Cebreiro integran Sebastián Teysera (voz), Nicolás Lieutier (bajo), Pepe Canedo (batería), Santiago Butler (guitarra), Rafael Di Bello (guitarra), Carlos Quijano (saxo) y Alejandro Piccone (trompeta) colmó anoche el Galpón 11, lo que derivó en una nueva función, la que hoy a las 20 se desarrollará en el espacio municipal de Cabral y el río. Y si de gratitud se trata, la posibilidad de este segundo show en Rosario fue valorizada por el cantante ante Rosario/12: "La función agregada es un premio de la gente y el reconocimiento al laburo que nosotros venimos haciendo hace muchísimo tiempo, callados la boca, sin tanta difusión ni nada. Es algo que respetamos muchísimo".

Sin embargo lejos está de ser fortuito el crecimiento de un grupo que a lo largo de sus tres discos sostuvo al ska como estandarte y a los ritmos rioplatenses como condimento, aunque amoldándose luego a un formato de canción que le sienta a la perfección, y que encontró su mayor exposición en A contraluz, placa que publicaran en 2004, y que parece haber marcado una nueva senda para el grupo. Una banda que depositó en Teysera la responsabilidad compositiva, lo que derivó en un trabajo claramente personal. Las nuevas obras, por lo pronto, sostienen esa línea introspectiva, según adelantó Cebreiro: "Creo que viene por ese lado introspectivo. También está muy presente el momento que se está viviendo, entonces bajar eso al papel también puede significar un pequeño cambio. Nosotros siempre hemos tratado de respetar lo gradual de un disco a otro y creo que esta no va a ser la excepción, no vamos a saltar con un disco conceptual, pero creo que va a ser un disco más para escuchar que para bailar. De todas maneras es La Vela Puerca tocando las canciones, y la la energía está ahí".

"Ya tenemos demeadas más o menos 25 o 26 canciones, que estamos bajando al ensayo --completó el cantante--. Las tenemos en la computadora y es la primera vez que demeamos de esa forma, entonces estamos bajando a los ensayos las ideas. Hay un montón de letras escritas, hay temas recontra definidos y la intención es empezar a grabar en octubre lo que va a ser el nuevo disco de La Vela, que tenemos ganas de que salga por el mes de marzo. No falta tanto y más ansiosos que nosotros no hay nadie, pero entendemos los tiempos y entendemos nuestra historia discográfica. Porque somos una banda de diez años pero tenemos tres discos nada más, pero ahora se nos está encendiendo la lucecita y tenemos ganas de sacarlo".

A lo largo de este nuevo proceso de creación y construcción grupal, los integrantes de La Vela Puerca sumaron al productor uruguayo Juan Campodónico, cuya labor fue destacado por Cebreiro: "Se prendió a laburar de arranque, de lo que era la bajada de los temas a la sala de ensayo, y es un trabajo que puede rendir su fruto. A lo que apuntamos es a una identidad propia musical, más allá de lo uruguayo o lo que sea. Está bueno trabajar con este tipo porque entiende mucho más de sonido que nosotros, y de afuera ve por dónde va la historia, y logra poner su arte en el nuestro".

Mientras tanto, la banda continúa girando por el país en la que probablemente sea la despedida de A contraluz, aunque no la última gira para un grupo ya acostumbrado al ritmo itinerante. "Nos estamos acostumbrando a esta forma de vida, que es entre amigos y quizás es más saludable. Hace tres años que empezamos a irnos de gira por Europa, y como que era impensado para nosotros tocar más de cinco o seis veces seguidas, y hemos llegado a tocar 56 veces en 65 días en nuestra primer gira por Alemania. Eso te da un ritmo y te mentaliza para seguir en esa movida".