Con el antecedente del exitoso film homónimo, con el respaldo de los premios cosechados en su paso por las temporadas porteña y marplatense, con el impacto visual que propone una escenografía poco habitual para las tablas nacionales, El placard llegará mañana a Rosario. Dirigida por Lía Jelín y protagonizada por Diego Peretti, Alejandro Awada, Osvaldo Santoro y Valeria Lorca, entre otros, la obra ha sumado dos nuevas funciones a las tres programadas originalmente en el Auditorio Fundación (Mitre 754), donde subirá a escena mañana a las 21, el sábado a las 21 y 23, y el domingo a las 19.30 y 21.30.

Merecedora de tres premios Estrella de Mar (a las labores de Awada, Lorca y Peretti), El placard se trajo de Mar del Plata la distinción "Teatro por la inclusión" que otorga la Municipalidad marplatense a través de su Dirección de Derechos Humanos. Es que, a través de un tono de comedia y una dinámica intensa, la obra pone el ojo en la defensa de las libertades. Así lo entiende Peretti, que en diálogo con Rosario/12 explica: "El personaje que interpreto es una persona muy indiferente a la mirada de los demás, nadie le da bolilla. Después de que la esposa lo dejó y el hijo no quiere hablarle, se entera que lo van a echar del trabajo. Un vecino nuevo de su edificio le propone un plan que es que, a través de un rumor, se haga pasar como gay, y de esa manera la empresa no lo echaría por miedo a que la tilden de discriminatoria, ya que es una empresa cuyo producto estrella son los preservativos. Por miedo a que toda la comunidad gay se le venga encima a este personaje, que por sus problemas personales no está rindiendo del todo bien, no lo echan. Y él comienza a ser visto como alguien que despierta, por lo menos, curiosidad. Este cambio en la mirada del otro provoca diferentes cosas, en todos los personajes provoca una actitud que metafóricamente se puede entender como salir del placard, salir de un encierro, expresarse con libertad, siendo uno mismo".

En ese marco, si bien una lectura apresurada podría instalar al conflicto en torno a la homosexualidad, es ésa apenas una de las aristas abordadas por el texto. "Es la lucha de estar en contra de la discriminación sexual, es una lucha contra la discriminación a lo sexual, lo religioso, lo político, las ideologías, formas de ser. Mientras no provoque daño a los demás, tratar de terminar con los prejuicios, toda una serie de cosas que hacen que la gente pueda vivir con más libertad", remarca Peretti, que refiere además al humor como medio para plantear esas temáticas: "La comedia provoca desde un lugar de entretenimiento bien directo, en este caso simple. Quizás con una identificación más rápida y un mensaje que llega de manera tal que uno reflexiona sobre el tema después de reírse".

Diseñada para darle agilidad a esa trama, y refaccionada para permitir su estreno en distintas salas del país, la imponente escenografía de El placard va más allá del mero impacto visual, según se preocupa por remarcar el actor: "Es una apuesta escénica importante, la verdad es que produce impresión. Y lo bueno es que no produce impresión simplemente para adornar el espectáculo sino que es claramente operativa la escenografía. Al ser una escenografía vertical van sucediendo cosas en diferentes lugares, como si fuera una pantalla, y detrás del escenario hay una arquitectura bien afinada para que podamos ir de un lugar a otro en la menor cantidad de tiempo posible, porque es una obra que necesita agilidad y vértigo".