Mañana, 10 de diciembre, Día Internacional de los Derechos Humanos, se cumplen también cuatro años de la inauguración del Museo de la Memoria de Rosario (fundado en 1998) en su sede definitiva: el edificio de la esquina de Córdoba y Moreno que fue diseñado en 1928 y que durante la última dictadura fue ocupado por el Comando del II Cuerpo de Ejército, el cual tuvo allí su base burocrática y operativa.

Aquí acudían los familiares de los desaparecidos a preguntar por el destino de sus seres queridos y no obtenían respuesta. Desde el 10 de diciembre de 2010, este espacio, de gran valor arquitectónico e histórico, es reinterpretado por artistas destacados de la ciudad y el país, convocados por el director del Museo, Rubén Chababo, para abrirlo a la reflexión como Lugar de Memoria. Mañana, el Museo propone una serie de actividades para todo público que se realizarán a partir de las 19.30 con entrada libre y gratuita. Los temas tratados se centran en la dictadura de 1976 a 1983 pero no se limitan a ella.

Se inaugurará la muestra "Prisioneros de la ciencia. Cautivos en la memoria". La muestra reúne una serie de fotografías de hombres y mujeres de los pueblos originarios, quienes a principios del siglo XX fueron tomados prisioneros, recluidos y exhibidos con sus familias en el Museo Antropológico de la ciudad de La Plata. La muestra, que podrá ser visitada hasta marzo de 2015, es obra del Colectivo GUIAS (Grupo Universitario de Investigación en Antropología Social), organización autoconvocada de la Facultad de Ciencias Naturales y Museo de la Universidad Nacional de La Plata. "Traemos estas imágenes para que al contemplarlas sepamos de la injusticia cometida en aquel tiempo, pero también para que al verlas, sirvan de inspiración para comprometernos con el trabajo de reparación todavía pendiente para con nuestros hermanos de las comunidades originarias", anticipan los curadores.

Como todos los años en esta fecha, se realizará la ceremonia de actualización de la obra Evidencias, un espacio diseñado por el artista rosarino Norberto Puzzolo en dos muros enfrentados del patio andaluz. Evidencias es un rompecabezas gigante interactivo, donde cada pieza contiene información individual y preguntas pendientes sobre cada víctima de la apropiación de niños durante la última dictadura militar.

Como obra abierta, va incorporando los resultados de la búsqueda de la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo y la restitución de nietos. Se trasladarán las fichas que reclaman por niños desaparecidos al muro de aquellos de los cuales se sabe, desde este año, su destino, su familia de origen y, en algunos casos, su verdadera identidad.

Esta jornada será también una ocasión oportuna para que el Museo reciba, de parte de la Fundación Naranjo, el archivo documental de Rubén Naranjo. Pintor, militante, editor y docente, fallecido en Rosario en 2005, Rubén Naranjo creó y dirigió la Escuela de Artes Visuales en el espacio Universidad Popular de la Biblioteca Popular Constancio C. Vigil, donde también dirigió la Editorial Biblioteca y el Instituto Secundario, y diseñó el mural de la fachada.

Desde 1984 hasta 1990, Naranjo fue director de la Escuela de Bellas Artes de la UNR. Fue miembro fundador de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos y trabajó con las Madres de Plaza de Mayo. Su archivo será alojado en el Centro Documental que lleva su nombre.

Por último, un grupo de músicos tocará el Berimbau, escultura musical de León Ferrari ubicada en la terraza, la cual estará intervenida por los pañuelos mexicanos que formaron parte de la muestra El ojo de la aguja. Una construcción de memoria en México, a modo de despedida antes de que sean devueltos a tierras mexicanas.