La palabra simulacro asociada en muchos aspectos con el juego teatral en cuanto a lo que tiene de representación, se ha resignificado en los últimos tiempos, a partir del auge de las sociedades mediáticas donde la realidad cada vez está más cercana a una puesta en escena en la que el concepto de simulación vela y reemplaza los tradicionales valores de lo que alguna vez se llamó "la credibilidad". Si esto lo asociamos al agitado tema de la justicia en nuestro país, tan puesta en la mira en los últimos meses a partir de la "telenovela del caso Nisman", se alcanza acomprender la repercusión que tuvo en Rosario, el "Simulacro de Juicio por Jurados" convocado por el CEP (Centro de Estudios Penales).

La movida coordinada por los fiscales provinciales Doctores Silvia Castelli y David Carizza, contó con la presencia del reconocido y prestigioso actor Lito Cruz que dirigió al grupo de actores locales que intervinieron como testigos de un supuesto homicidio vinculado a una relación sentimental, que se habría producido en el interior de un conocido country rosarino.

Ya en la convocatoria, principalmente dirigida a estudiantes de Derecho y sectores vinculados al ejercicio de la abogacía y a la franja potencial de "espectadores" que pudieran acceder a un "espectáculo" en horas tan poco frecuentes, estaba cifrada la estrategia que en una sociedad mediática como la nuestra, llegó a alcanzar.

Cerca de las 14, una nutrida cantidad de curiosos y de potenciales espectadores se agolparon en las puertas del imponente auditorio que la Federación Gremial de Comercio de Industria tiene en Córdoba al 1868, para asistir a un simulacro pautado recién para después de las 15.

Ni los fiscales, ni los abogados intervinientes, como así tampoco los propios organizadores y el grupo de actores que participaron de esta propuesta, soñaron con una audiencia tan masiva, salvo los que incluían dentro de esta original experimentación, a la figura siempre convocante del actor y maestro de teatro Lito Cruz.

Allí apareció nuevamente el concepto de "sociedad mediática" que desde la propia difusión de la movida, hasta la cobertura intensa que hicieron la mayoría de los medios locales, destacaron justificadamente el rol protagónico de Cruz, pionero en esta iniciativa ya que fue uno de los responsables principales de los Juicios por Jurado desarrollados en la provincia de Buenos Aires y en el Consejo de la Magistratura.

Salvo este medio que publicó la nómina de los integrantes del elenco que Cruz dirigiera, y que son todos actores rosarinos, las agencias de noticias y sus repetidoras, el resto de los medios gráficos y los canales de televisión de "acá", omitieron este dato, enriqueciendo ya un historial que pesa y sigue abonando el famoso desconocimiento por parte del público acerca de los protagonistas de la intensa actividad teatral que se desarrolla hace años en esta ciudad.

Al finalizar la primera parte de esta apasionante performance donde tanto actores de teatro como abogados defensores, fiscales y el propio Juez, llevaron adelante con un mismo criterio ético y estético, el público intentaba acercarse para saludar a los participantes del simulacro.

En esa oportunidad fue cuando se pudo escuchar una tradicional pregunta que hace años, algunos teatreros de esta ciudad vienen escuchando al finalizar alguna de sus puestas en escena: "¿Ustedes son actores de Rosario?

En esta ocasión estos comentarios se veían fundamentados por la difusión incompleta de este aplaudido acontecimiento, que para muchos en lo que concernía a la labor actoral, estaba a cargo de un grupo de actores que al estar dirigidos por Lito Cruz, provenían obviamente de Buenos Aires.

Gracias a la generosa entrega del prestigioso actor que al cierre del Simulacro de Juicios por Jurados, agradeció a todos los que participaron, destacando especialmente la labor del elenco rosarino entre quienes estuvieron Silvia Galizzi, Tamara Bella, Víctor Ferraro, Héctor Bellomo, Víctor Tinelli y Julio Cejas.