Con la presentación esta noche a las 20, en el Teatro La Comedia (Mitre y Ricardone), de la obra El rastro, retorna a la cartelera local, el exitoso ciclo Montajes Mínimos, que el año pasado promovió una movida inédita en la ciudad, con una programación de alto nivel nacional y actividades de reflexión acerca del teatro que se produce en los últimos años.

En esta segunda edición, los Montajes Mínimos se amplían, incorporando a la movida organizada en principio por La Comedia, el Centro Cultural Parque de España y Plataforma Lavardén, en una auspiciosa coproducción que bien podría servir de rampa de lanzamiento para futuros emprendimientos artísticos en la ciudad.

El ciclo apuesta -según sus organizadores- a investigar el lenguaje teatral, las nuevas dramaturgias y el universo de estilos interpretativos que componen la escena independiente actual en el país, para compartirlos con el público rosarino; junto a espectáculos locales invitados.

"Montajes mínimos surgió sobre la idea de presentar la escena del teatro independiente de la actualidad y abrirla a todo tipo de público, en especial a aquellos que no van a ver teatro independiente por los motivos que sean: prejuicio, desinterés, espacios no convencionales", dijo a Rosario/12, Diego Ullúa, uno de los mentores de esta interesante movida.

Precisamente, el responsable de la programación del ciclo siguió apostando a un teatro casi de cámara, con producciones como las que hoy se presenta y que han tenido buena repercusión de público y de la crítica teatral especializada.

El rastro, que abre este proyecto de difundir el buen teatro que se hace en el país es una recreación de la notable actriz porteña Analía Couceyro; de la novela del mismo nombre, escrita por la mexicana Margo Glantz, con el aporte musical del cellista Rafael Delgado y la mirada siempre incisiva en la dirección del maestro porteño Alejandro Tantanian.

El viernes próximo la ciudad tendrá el gusto de reencontrarse con otro de los talentosos actores locales que trabaja con gran reconocimiento en Buenos Aires: Pablo Palavecino llega con Walter hecho pedazos, un logrado homenaje al irreverente creador Batato Barea.

La obra, que se podrá ver a las 21.30 en el Teatro Príncipe de Asturias, cuenta la historia de Walter, un peluquero de barrio que sería un alter ego del inolvidable Batato; un impactante monólogo basado en la escritura teatral de Facundo Zilberberg y la dirección de Gabriel Wolf.

El sábado 9 a las 21.30 en la Plataforma Lavardén llega desde Santa Fe una propuesta aplaudida en distintos festivales en los que se presentó: Ricardo, una farsa, con dirección de Sergio Abbate, una versión farsesca de la histórica tragedia Ricardo III, de Shakespeare.

--¿Cuáles son los criterios para elegir una programación que ha demostrado que se puede ver un teatro inteligente, creativo y que además convoca a una gran cantidad de espectadores?, preguntó Rosario/12.

--Con respecto a la selección, que realizo a la manera de una curaduría; trato de mostrar los diversos lenguajes y enfoques interpretativos, los variados estilos dramatúrgicos y no sólo de la palabra ( ya que creo que hay una dramaturgia de la imagen); sino también las diferentes concepciones en el uso espacial, y el cruce entre el teatro, la música, que se está usando mucho en vivo y en lo posible la tecnología aplicada a la escena teatral", dijo Diego Ullúa.

Actor, bailarín y coreógrafo, Ullúa es además un inquieto espectador que se interesa por ver todo lo que se produce en distintas plazas teatrales del país, y asume el doble desafío que implica "no sólo interesar al público no habitué del teatro independiente, sino intentar la adaptación de una puesta pensada para espacios no convencionales o con poca capacidad a una sala a 'la italiana'", según sus palabras.

El viernes 15, a las 21.30, subirá a escena en el Teatro La Comedia, Quien lo probó lo sabe, unipersonal basado en la vida y obra de Lope de Vega; interpretado por Mariano Mazzei, con dirección del prestigioso creador porteño Mariano Moro.

El sábado, a las 21.30 en Plataforma Lavardén, Montajes Mínimos presentará la notable Rosa brillando, una ceremonia teatral inspirada en el voluptuoso y transgresor universo poético de Marosa Di Giorgio, una de las más notables autoras latinoamericanas.

Una invocación a la poética de Marosa Di Giorgio interpretada por la dúctil actriz porteña Vanesa Maja y la dirección del maestro Juan Parodi.

El viernes 22 a las 21.30, en el Teatro Príncipe de Asturias, el actor rosarino Miguel Bosco volverá sobre los pasos de uno de sus mejores trabajos escénicos: Horacio, amigo de Hamlet, con la dirección de Matías Martínez.

El sábado 23, en el Teatro La Comedia a la misma hora, otra experimentación sobre la dramaturgia de Shakespeare: Romeo y Julieta de bolsillo, interpretada por Julia Garriz y Emiliano Dionisi.

El viernes 29 a las 21.30, en Plataforma Lavardén, otra consagrada obra rosarina: Moreira delivery,interpretada y escrita por el dúctil actor de La Comedia de Hacer Arte Pablo Felitti, con dirección de Hernán Peña.

Finalmente, el sábado 30 a la misma hora pero, en el Centro Cultural Parque de España (Teatro Príncipe de Asturias), se pondrá en escena la última obra del ciclo: Crol, pequeño homenaje a nadadores pioneros con dirección de Verónica Schneck.

"El nombre del ciclo fue pensado a manera de síntesis de lo que es la escena independiente actual, pero no por ser chico o tener pocos actores o hacerse en un lugar pequeño; Montajes mínimos es más bien un concepto que engloba lo que significa el ciclo; no pensado por lo pequeño, porque el teatro independiente, para mí es un teatro de dónde salen los grandes actores y directores...o sea, es un teatro grande!", concluyó Ullúa.