Un espacio emblemático para la cultura de la ciudad de Santa Fe volverá al brillo de antaño a partir de la puesta en marcha del proyecto de recuperación de la vieja mansión conocida como la Casa de los Gobernadores. Afectada por el hundimiento de los suelos que amenazaban con derribar la centenaria construcción, la casona del tradicional barrio Candioti se someterá a un proceso de consolidación coordinado por la arquitecta Silvia Bournissent, en un trabajo para el cual el gobernador Jorge Obeid destinó cuatro millones de pesos.

"La obra se encuentra bastante avanzada", comentó a Rosario/12 el secretario de Cultura provincial, Jorge Llonch. "En una casa que es patrimonio, aparte de hacer el proyecto de consolidarla, de volver a poner a la casa parada y evitar que se hunda, hay que tratarla como una obra de arte. Si sacás un azulejo tenés que guardarlo en el lugar exacto, como un despiece, y después de realizar la consolidación, volver a armar todo. Es algo absolutamente artesanal", detalló.

Por su parte, Ana María Cecchini de Dallo, subsecretaria del área, destacó el valor del edificio para la sociedad santafesina: "Esta casa tiene valor histórico, porque es muy representativa de lo que fue el espacio del Boulevard. Esta casa la construyó una familia muy adinerada, en su momento la ocupó el gobernador Rodolfo Lehman, y de allí que toma como denominación Casa de los Gobernadores, pero eso fue una casualidad, porque no es que la casa se convirtió en sede de los representantes del gobierno. Tiene el valor arquitectónico de un paradigma de esa época, y la provincia comenzó a ocuparla en 1942 como edificio de oficinas administrativas, y allí comienza el deterioro. En los 90 pasa a ser la Casa de la Cultura, pero ya con un deterioro grave a partir de filtraciones en todo el basamento de la casa, y por eso finalmente se cerró, lo que agudizó el abandono. La idea entonces es recuperarla como un espacio cultural para la ciudad, que es lo que me pidió personalmente el gobernador Obeid".

Asimismo, la funcionaria explicó que los recursos serán administrados por la Asociación de Amigos de la Casa de la Cultura: "Ellos han ido administrando fondos para algunas de las refacciones o arreglos parciales que se le fueron haciendo históricamente. Ahora volvieron a reintegrarse y asumieron la responsabilidad de administrar los fondos, que será a través del sistema de administración delegada que tiene el Estado".

En tanto, los recursos no se destinarán únicamente a la consolidación y embellecimiento de la Casa de la Cultura, sino además a la creación de nuevos espacios, tal como detalló Bournissent, responsable del proyecto arquitectónico: "Se hace necesario completar el programa de usos que, hasta antes de la clausura, sólo estaba limitado a actividades en la planta noble, proyectando nuevos equipamientos e instalaciones como climatización, sonido, seguridad, gas y un ascensor, todas necesidades inexistentes al momento de su construcción, casi cien años atrás".

"También se incorporarán algunos elementos arquitectónicos necesarios a las nuevas funciones, como una escalera exterior de acceso a la buhardilla y salida de emergencia, un pabellón sanitario y un nuevo acceso que conduzca al auditórium y al ascensor", completó la arquitecta.

Una vez concluidos los trabajos --la fecha estimada es finales del año próximo--, la casona recuperará sus actividades. "La Casa de la Cultura es un organismo de la Secretaría. Obviamente hoy el personal está distribuido en otros organismos, pero es un lugar muy interesante. Sus actividades las absorvió el Museo de Bellas Artes Rosa Galisteo, pero la Casa de la Cultura tenía su vuelo propio. Cuando se terminen los trabajos va a volver a tener la impronta que tenía", concluyó Llonch.