Mostrándose consecuente con la necesidad de que los adultos abandonen un rol pasivo de acompañantes para transformarse en auténticos protagonistas, desde el próximo martes El Jardín de los Niños ofrecerá al "público grande" sus Veladas Renacentistas, un proyecto impulsado desde el espacio dependiente de la Secretaría de Promoción Social, ése que le da vida al Tríptico de la Infancia que Chiqui González ideara algunos años atrás. Y es allí, en la inclusión del adulto en un terreno asociado directamente con los menores, en donde brilla una propuesta que recrea, a través de un lenguaje teatral, "un recorrido temático por el Territorio de la Invención", tomando a la figura de Leonardo Da Vinci como eje central.

Aníbal Mesapelle, director de El Jardín de los Niños, relató el surgimiento del proyecto a Rosario/12: "La idea tiene como dos vertientes. Por un lado desde que abrimos El Jardín teníamos ganas de ir incorporando cosas para otros grupos etáreos. Que el adulto vaya al Jardín per se, y que no solamente vaya en su rol de padre, hermano, tío o abuelo, sino que pueda encontrar cosas que satisfagan sus expectativas. Entonces desde el año pasado fuimos incorporando algunos ciclos o cursos afines a las cosas que hacemos, y surgió la idea de ponderar un poco y poner en la consideración, a través del lenguaje teatral, el legado de Leonardo Da Vinci. La mayoría de nuestro trabajo está inspirado en muchos de sus descubrimientos e investigaciones, entonces un poco es como un homenaje y la posibilidad, a través de un lenguaje nuevo para nosotros, porque no hemos incurrido mucho en el lenguaje teatral, de poder acercarnos un poquito con cuatro escenas que remiten a diferentes momentos de la vida de Leonardo y cuál es su legado".

Desarrollándose bajo tres ejes centrales --Da Vinci y la pintura, Da Vinci y sus investigaciones en ingeniería (donde el vuelo se hace presente a través de la fantástica Máquina de Volar) y "un tercer momento quizás menos conocido que es su relación con la cocina"--, el proyecto apunta a la transformación del adulto en participante activo. "Se supone que en la mayoría de las actividades el adulto puede participar cuando lleva a sus hijos o alumnos, aunque nunca lo hace como protagonista principal, sino como una especie de partenaire. Entonces la apuesta es un poco ésa, y pensar también en un Jardín de noche. Sobre todo para el verano, porque el Parque Independencia fundamentalmente es para la noche, porque hasta las seis o siete de la tarde ves muy poco movimiento, porque hace mucho calor y la gente por ahí tiene otras alternativas, pero a la tardecita va llegando. Entonces queremos volcarnos también a propuestas que tengan que ver más con los adultos, y con propuestas culturales como las del cine o el teatro. Tratando de ir innovando, ésa sería la idea", analizó Mesapelle.

Por su parte, la secretaria de Cultura municipal Chiqui González se mostró entusiasmada con la convocatoria del espacio a nuevos segmentos etáreos: "Al acercamiento del público adulto lo vivo con alegría, porque es la esencia misma del proyecto. Nunca nos olvidemos que es con los chicos para los adultos, ésa fue la estrategia de la Feria del Afecto y que venimos manejando hace mucho tiempo, donde cada uno, la ciudad y nosotros, vamos entendiéndolo progresivamente. En el Jardín de los Niños también han hecho ciclos de cine para adultos, y nosotros ahora vamos a hacer una Escuela Móvil de La Isla de los Inventos para adultos y una especie de Bau Haus para adolescentes adentro de La Isla. Tenemos el Tríptico de la Infancia que está girando hacia donde debería, que en realidad es la manera de estar y de ser de la infancia, las operaciones creativas de la infancia utilizadas de manera poética y lúdica para que los adultos encuentren un lugar de pertenencia. De las entradas a La Isla el 64% son de adultos, y eso está sucediendo porque estos dispositivos están pensados con altísimo nivel metafórico".

En ese sentido, González amplió el concepto cuando resaltó: "El nivel metafórico es el que hace que, por ejemplo, haya participado una delegación de cincuenta maestros que volaron todos en la Máquina de Volar. Detrás del vuelo hay una metáfora aglutinante, y en La Isla la vida como viaje pedagógico con estaciones es otra metáfora, y el caos como estallido de color es otra metáfora. Cada una de las cosas son verdaderas metáforas, o signos dirigidos al adulto. Lo cual no quiere decir que no abarque el vínculo niño, adolescente y adulto. Ahora está llegando la hora del grande, porque a veces el grande necesita estar sólo entre grandes para poder apreciar desde otro lugar esos juegos y poder intervenir en ellos desde otro lugar. Lo primordial es el lazo y el vínculo. Es muy hermoso que los adultos puedan tener segmentos entre pares, pero atención, esa visión de adulto no va a dar vuelta el concepto de que es metonímico, que siempre es fragmentario, que no está dedicado al desglose desde la deducción del análisis sino más bien a hacer tu propia apropiación de fragmentos, que es lo que a nosotros de alguna manera nos inspire el mundo de los niños".

Es así como la apropiación que los adultos hagan del espacio no alterará el funcionamiento de los elementos que lo alimentan. "No es que a partir de la intervención del adulto se cambien ni los juegos ni el modo de habitar esos lugares, que siguen siendo poéticos, metafóricos, imaginarios y extra-cotidianos. Lugares donde no se divide cuerpo de mente, donde no se divide hacer de pensar, donde no se divide construir de crear. El adulto trae un pensamiento más lógico, más intelectual, más formado desde el concepto, más de la generación Gutemberg, pero igual está reclamando esta otra visión, desde el aprendizaje, desde el fragmento y desde la posibilidad de hacer sus propios recorridos. Está pidiendo a gritos la poetización del mundo", destacó la Secretaria.

Diseñadas para albergar a grupos de setenta personas, las Veladas Renacentistas se desarrollarán por primera vez el martes próximo, continuando luego con sus presentaciones los días 2, 9, 13 y 16 de marzo, siempre en el horario de las 20.30. Y es precisamente a partir del carácter reducido de los contingentes que se ha organizado un sistema de reservas de entradas, que pueden solicitarse comunicándose a los teléfonos 4802611 o 4802421, o bien personalmente en El Jardín de los Niños (Parque Independencia), de martes a viernes de 10 a 17, o los sábados, domingos y feriados entre las 10 y las 18. Quienes se acerquen a participar descubrirán en el personaje de Giorgio Vasari al guía que los acompañará por una recorrida que los acercará a la chance de volar, soñar y romper con la rigidez de estructuras autoimpuestas.