CONTRATAPA
› Por Miriam Cairo
El Pájaro y la Calandria suben la escalera y se detienen junto a una puerta cuando escuchan los gemidos de otros pájaros.
El Pájaro: Suenan igual a los videos.
La Calandria: Creo que suenan mejor que los videos. (Silencio de pájaros.) ¿Será impropio espiar por la cerradura?
El pájaro: No seas atrevida. Vamos a lo nuestro. (Suben el siguiente peldaño y el Pájaro, con su ala de zorzal quemante, abre la puerta de la jaula de los espejos).
La Calandria: ¿Sabés lo que es la parafilia?
El Pájaro (aleteando, mientras deja los anteojos, el celular y las llaves sobre la mesa de luz): Me suena (Hasta el momento él cree que la parafilia es un género literario).
La Calandria: Son gustos eróticos que se salen del manual de los buenos esposos. (El pájaro muestra mayor interés, ahora que la parafilia no es un género literario). Por ejemplo, vos y yo somos muy parafílicos. Para la psiquiatría avícola estamos enfermos.
*
(El Ruiseñor besa a la calandria con besos blancos, besos oblicuos, besos negros, besos transversales, besos morados, y la calandria se contornea, se tornasola).
El Pájaro (mirando hacia arriba): Tenemos el espejo en el techo. ¿Eso es parafilia?
La Calandria (exagerando sus conocimientos sobre el tema): No. Me parece que eso está permitido.
(Ruedan por las mantas y la Calandria desliza las alas por las nalgas del Pájaro, hunde las plumas en las prohibidas dunas).
*
El Pájaro: Voy a sacarte fotos en el aire. (La Calandria deja que el hornero maniobre la cámara con el ala derecha mientras con la izquierda atiende los verdaderos asuntos. El Pájaro gatilla cuando la Calandria emprende el primer vuelo).
La Calandria: ¿Ves? Esto es parafilia (El Pájaro, satisfecho, comprende). Escuchar los gemidos de otros pájaros, también es parafílico.
El Pájaro: ¿Y este cogollo pelado?
La Calandria (satisfecha): Sí, tengo un pubis parafílico.
El Pájaro: Yo siempre había pensado que mi poder de seducción estaba en mis ojos, y ahora sé, que está en mis alas.
(Se retuercen los pájaros con movimientos marítimos. Vistos desde arriba, se diría que hay un cuerpo decapitado. Vistos desde adentro alguien vuela por segunda vez).
*
El Pájaro: Contame más. Qué otra cosa es parafílica.
La Calandria: Hacer que caminen insectos por el pubis.
El Pájaro: No, eso no.
La Calandria: Yo le regalaría esa parafilia a Marosa Di Giorgio.
(Vistos desde allá, siempre hay uno que es otro.)
*
El Pájaro (levantando la cabeza): Hay que ponerle un nombre.
La Calandria (en un suspiro o en un vuelo, o las dos cosas a la vez): Un nombre, ¿cuál?
El Pájaro: Capullo, botón, brote, pimpollo, cápsula, yema.
La Calandria: Lacan.
(Vistos desde el espejo lateral, uno de los dos, otra vez está en el cielo).
*
La Calandria: Conocí a Fulano en la semana de la lectura.
El Pájaro (bocabajo)¿Y?
La Calandria: Se cree el Estrellita Mía.
El Pájaro (narcotizado): Es un literato frígido. Cuando yo estaba apasionado por el mirlo de Carver, por el gorrión de Bukowski, por el ángel de Cheever, él me mandó de regalo al cuervo de Tobias Wolff, como si mis gustos literarios debieran seguir sus mandatos.
La Calandria (en un suspiro o en un vuelo, o las dos cosas a la vez): Es un canario sin alas. No tengo ninguna parafilia para él. No se merece más que una cópula doméstica con una canaria doméstica. (Vistos desde el centro, están en los bordes.)
*
El Pájaro: ¿Cuántos fueron hasta ahora?
La Calandria: Creo que cuatro, pero hubo otros fantasmales, que llegaron muy pegados a uno anterior y no sé si hay que contarlosà
El Pájaro: Contalos, soy tu profe de álgebra.
La Calandria: A Bolaño le regalo la parafilia onanista del narrador narrado. (El Pájaro la besa con un beso glandular). A Perlongher le regalo la parafilia del boxeador con ruleros. (La Calandria hace un giro de ciento ochenta grados). A mi peluquera le regalo la parafilia de los maniquíes desnudos. (A los ochenta grados del giro se le suman entradas y salidas rítmicas que elevan al Pájaro en su segundo vuelo) ¿Vos cuál elegís?
El Pájaro (elevado a la enésima potencia de pájaro): Nada, yo no estoy en condiciones de pedir nadaà Con vos tengo el compendioà
(Los pájaros, vistos desde donde sean vistos, levitan).
(Vistos desde lejos la oscuridad es pura iridiscencia).
(Vistos desde el verdugo cada vuelo puede costarles la cabeza).
(Vistos a trasluz no existen).
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