Bibliotecarias

Octubre termina y comienza el tiempo de la "autocrítica" en las unidades de información de las escuelas. Esas unidades de información y de lecturas varias son nuestras bibliotecas escolares. Realmente, la autocrítica es necesaria para reafirmar nuestra posición ante las nuevas autoridades escolares o simplemente para ver las líneas de acción realizadas con la comunidad inmediata. La autocrítica debe ser puente de la pro acción positiva. Esto permitiría visualizar los cambios necesarios desde el simple gesto de mayor comunicación con los directivos, docentes y padres de alumnos. Sin olvidar que la desventaja numérica siempre presente y activa (un bibliotecario cada 60 docentes con suerte) y la distribución horaria que no contribuye una atención conforme a todos los miembros de la comunidad educativa.

La principal sospechosa de la mala imagen de la biblioteca siempre será la encargada de la biblioteca. Por eso, la autocrítica constructiva tiene que ser su arma más fuerte. Tenemos el valor de ser una sola bibliotecaria en una escuela que tiene un ritmo rápido, cambiante y siempre exigente en cuanto a lo últimas novedades de editoriales educativas (que a su vez son siempre ausentes en nuestras bibliotecas).

Este tiempo de autocrítica es necesario valorizar las fortalezas ciertas y enfocar las debilidades como meta de transformación para el próximo ciclo lectivo.

Pero mucha atención. Las bibliotecarias solas no, debemos tener el conocimiento de las autoridades de la escuela, ya conocemos los obstáculos: tiempo, recursos y físico (una sola persona). Ahora falta que nos den una mano amiga de apoyo directivo. Las competencias profesionales del bibliotecario son técnicas de carácter co educativa y socio cultural, no de carácter pedagógico exclusivo.

Ahora que aclaramos puntos viene una etapa de pre balance: "autocrítica constructiva", para reafirmarnos en nuestro entorno con el apoyo de las autoridades, ahora sigue otro paso como dilema: ¿nos acompañarán en este proceso respetando nuestras competencias?

Esa parte el tiempo la dirá. Todo cambio como transformación necesita del tiempo no de la magia. Necesita de buenas voluntades como una buena comunicación.

Ana María Cordoba

http://centrodebibliotecariossf.blogspot.com/