Principios y fines

Hace unos cuantos años Groucho Marx decía con su sarcasmo característico: "aquí le presento mis principios, sino le agradan tengo otros", lo que en el Groucho era ironía para la mayoría de los aspirantes al dominio y el gobierno es la instancia liminar para el ascenso fugaz o permanente en la pirámide del poder. En efecto, la historia muestra que medios y fines se han confundido y trastocado en beneficio de mezquindades de minorías y elites siempre dispuestas a la transacción. A este síndrome perverso el anarquista Rudolf Rocker lo llamó maldición del pragmatismo. En otras muchos ejemplos podemos citar el de los socialdemócratas alemanes votando los impuestos de guerra, al pc argentino apoyando a Videla y porque no recordar a los burócratas de la CGT avalando la aniquilación en masa del menemismo noventista. El próximo año será pródigo en promesas de transparencia administrativa, por doquier emergerán los mensajes que proclaman la renovación institucional. Es triste aceptarlo, pero el candidato con mayores posibilidades de acceder al gobierno provincial ya dijo a quien quisiera escucharlo que no revisaría el pasado, ¿es decir que los asesinos de Pocho Lepratti, Graciela Acosta y demás asesinados en el Diciembre de 2001 seguirán gozando de impunidad? También serán defraudadas las expectativas de los familiares de las víctimas del gatillo fácil, los inundados y muchos de los que están solos y esperan. La implacable respuesta la darán los hechos. Estos suelen confirmar los dichos del enmascarado chiapaneco, más que cualquier teoría lo inteligente es la realidad.

Carlos A. Solero

2007

Aquellos con los que este años hemos marchado por las calles exigiendo pan, justicia, educación y trabajo digno, aquellos con los que vimos reaparecer y revivir todo el horror y salimos a exigir aparición con vida de Julio López, aquellos con los que nos sentamos a charlar, a discutir, a escucharnos, siempre con mutuo respeto militante, aquellos que nos acompañan, nos ayudan a llevar adelante nuestra tarea, nos contienen, nos empujan, nos dan aliento, los solidarios de siempre aquellos con los que hicimos un compromiso de vida para "no olvidar, no perdonar, no reconciliarnos con los genocidas y sus complices", aquellos a quienes nos une la historia en las luchas a través de los años o desde hace muy poco

para todos. Deseamos que el 2007 cristalice la unidad de acción, capaz de darle solución, mas temprano que tarde, al dolor y la impunidad que sufre nuestro pueblo. ¡Por eso brindaremos! No olvidamos, no perdonamos, no nos reconciliamos

Asamblea Permanente por los Derechos Humanos de Rosario